Volver al continente

Desde la última vez que visitamos a la familia de mi mujer, se habrán imaginado lo que ha llovido y con la pandemia de por medio. Finalmente esta pasada Semana Santa pudimos volver al continente.

Esta es la parte fácil, aunque cuando uno cruza la frontera siempre tiene que armarse de paciencia en lo que te atienden. Obtener el visado es ya otro punto y a parte, la de gente que hay estos días solicitándolo.

Desde Shenzhen nos vinieron a buscar y después de un trayecto de poco más de 1hora, llegamos a Boluo que es donde reside la hermana de mi mujer. No era mi primera vez pero siempre habíamos estado de pasada, y en esta ocasión nos quedaríamos varios días.

Los primeros días fueron de reuniones familiares y con poco tiempo para escaparme a correr, hasta que finalmente pude y salí a explorar por los alrededores. Crucé este puente sobre el río Dong y me dirigí cerca del núcleo urbano.

Volver al continente

La noche anterior había llovido un poco y el ambiente estaba perfecto, sin humedad y algo de brisa.

Fui callejeando en paralelo al río hasta que llegué a una zona de casitas con algunos murales curiosos.

¿Y si paso este portal a dónde me llevaría ? Creen que seguí por ahí o bien di media vuelta.. En la próxima entrada les cuento 😉

El parque de Tuen Mun

Después de un parón de unos meses, nos venimos hasta el parque de Tuen Mun. Esos sitios que aún quedan por descubrirse en la ciudad y nada mejor que hacerlo en familia.

Aprovechando que hacía buen día y después de haber ido a comer algo por la zona. El parque está emplazado bastante cerca de la estación de metro Tuen Mun West y como referencia el centro comercial V-city.

En las torres que vemos al fondo a la izquierda es donde está el centro comercial mencionado antes.

El paseo va ondulando entre distintos caminos que podemos ir alternando, yendo hacia la zona de la cascada..

.. seguir en dirección a la zona del parque infantil.

Los jardines están bastante cuidados y no les falta colorido con una buena selección de «flor de mundo». No le falta ni hasta un molino de viento; si fuesen tulipanes en su lugar 🙂

Tampoco me olvido del lago en la que se juntan una buena panda de tortugas. En ese momento se andaban peleando por unas lonchas de pan de molde que alguien le había soltado no mucho antes, ejem..

Es un buen espacio verde para el disfrute de la comunidad. Rincones para todo el mundo para estar en armonía.

Seguro que volvemos otro de estos findes para poder explotar un poco más o tan sólo dar un paseo y desconectar en lo que las niñas corretean un rato en su zona.

Fanling Golf

Este pasado domingo nos fuimos al campo de golf en Fanling en un día de puertas abiertas. Puesto que el pasado día 1 se celebró el 25 aniversario del día de Hong Kong, había organizado para que las familias pudieran acceder de forma gratuita.

Inicialmente estaba planeado para hace unas semanas pero tuvieron que posponerlo por la llegada de un tifón. El proceso sencillo, tan sólo rellenar un Google Docs con mi nombre y el número total de asistentes.

Desde las 10 de la mañana y hasta las 6 de la tarde para acceder. Nosotrks fuimos a eso de las 2, y con el calor que hacía, pero sin que faltase el agua y aprovechando la sombrita.

Primeramente habíamos ido a la zona de niños con algunas atracciones hinchables y otros juegos.

Entre una cosa y otra se nos fueron casi dos horas, aún así la gente no dejaba de llegar para aprovechar hasta última hora y quizás cuando el sol iba apretando algo menos.

No obstante nos quedó pendiente ganas el poder llegar hasta el jardín de mariposas y donde estaban las tortugas.

Para romper la «clásica rutina» de domingo estuvo bien el plan 🙂 y culminando con un heladito de regreso a casa.

Cumpliendo tres

Así como quien no quiere la cosa, ha pasado otro año y las niñas han cumplido 3 añitos ya. También ha sido una ausencia bastante prolongada desde que escribía el último post cuando visitamos Bangkok.

¿Qué da de sí un año? pues la verdad que se han juntado muchas cosas y más aún en los meses recientes debido a la situación de pandemia global provocada por el coronavirus. Algo que me he dejado en el tintero pero que no sería mala idea comentarlo el cómo se vivió desde los inicios por allá a mediados del mes de Enero; seguiría su paso hacia Europa, América y desatando la alarma global que aún durará por unos meses más.

En lo que a viajar respecta, será uno de esos años que se recordará por mucho tiempo como uno de los menos viajeros. Un sector el del turismo muy afectado con la paralización de muchas rutas y su consiguiente impacto en los establecimientos hoteleros. Ya se podrán imaginar lo mucho que supone para mis Islas Canarias, pero confiar que la recuperación vaya lo mejor posible aunque llevará su tiempo claro está.

Y metidos de lleno en el verano, aprovechando lo que se puede con algunos días de piscina pero con los rebrotes que estamos teniendo estos días, se ha empezado a dar un paso atrás y se empiezan a cerrar algunas instalaciones 🙁

Si todo no se tuerce, las niñas empezarán el colegio en la primera semana de septiembre. Veremos si el virus sigue contenido y no afecta al transcurso de las clases; el panorama puede cambiar de una semana para otra y hay que seguir siendo prevenidos y sobre todo con los más pequeños.

Ahora que «he roto el hielo» nuevamente, será cuestión de no abandonarme y volver a retomar el buen hábito de postear semanalmente. Veremos lo que puedo dar de mi mismo 🙂