Empieza el otoño

Hoy es un día de estar en familia y es que empieza el otoño con uno de los festivales más importantes: Mid Autumn. Los clásicos mooncakes no pueden faltar en una noche como la de hoy en las reuniones familiares. Y para los más pequeños jugar con farolillos de papel.

Un día en el que la gente sale un poco antes de la oficina pero eso conlleva un problemón: las aglomeraciones. Todos quieren llegar a casa cuanto antes, bien sea para preparar la cena o reunirse con los suyos a tiempo.

Avanzamos un poquito más y la puerta del vagón queda más cerca pero no es tarea fácil. Los trenes vienen con bastante frecuencia pero ya vienen bastante repletitos de gente. Los que se ponen nerviosos, algunos empujones y voces; la gente no sabe tomarse con calma las cosas y algunos pierden los papeles.

Sea como sea y pasados los momentos de estrés, ya en casa a disfrutar del fin de semana largo que tenemos por delante. Noche de luna llena y recibiendo una estación que muchos reciben con los brazos abiertos.

¡Feliz festival de otoño a todos! No sólo desde Asia sino desde otros muchos puntos de nuestro planeta haciendo que la tradición continúe.

Otoño a la vuelta

Primer día del mes de septiembre, lunes y además el comienzo del curso escolar. Se acabó la tranquilidad de los colegios y el bullicio llenará de nuevo las aulas, empezando por los más pequeños y poco a poco los niveles superiores. El periodo de las vacaciones toca su fin, unas 6-8 semanas en función de cada colegio y ciertas actividades extraescolares. Luego decimos en España que nos parece corto el verano y es que nos quejamos de vicio 🙂

Digamos que ahora es el momento cuando los padres pueden tomarse un respiro porque seguro se les habrá hecho largo el tener a los niños por casa; diría que más de uno aprovecha para tomarse algún día libre, jeje.

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Desde hoy ya se ha notado una mayor actividad por la calle yendo al metro, las guaguas de los colegios o los padres y/o familiares llevando a los niños. Una semana que seguro se hace algo larga al tener que volver a los madrugones pero luego vuelven a formar parte de la rutina cuando uno se pone el chip. Así es como nos pasa a todos, estamos un poco off y sólo hace falta que nos reactivemos aunque siempre nos quedará la inestimable ayuda del café.

Y en lo que al trabajo se refiere, es también como una vuelta al cole retomando más actividad tras la ralentización que supone el periodo estival. El último trimestre del año y posterior recta final del año, pero aún hay tiempo por delante para adelantar acontecimientos.

Además el próximo martes se celebra el «festival de otoño», momento de reunirse con la familia y disfrutar de algún pedacito de mooncake si es que aún no hemos comido. Una semana que se hará más cortita. Tiempo de obsequiar a algún amigo o familiar cercano, es su turrón particular por estas fechas.

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Como el turrón

Cuando uno ve que ya se anuncian por la tele y los ve en los escaparates de las tiendas, es que algo significativo se está acercando. Digamos que recuerda un poco a la época de las Navidades con el clásico anuncio del muchacho que vuelve a casa para juntarse con la familia. También se trata de algo dulce, aunque un poquito pesado, pero toda una tradición que marca el inicio del otoño según el calendario lunar chino. Aunque mientras tanto para mi siga siendo verano hasta casi finales del mes que viene 🙂

Los mooncakes tanto en su formato tradicional como en sus variantes en frío ya están disponibles para comprar, más vale ser precavido y comprar con antelación porque seguro más tarde las existencias empiezan a escasear. Son muchos los que se suben al carro durante esta tradición y aprovechan para sacar su propio mooncake de algún sabor poco convencional o bien porque el empaquetado en sí es un buen motivo para regalo por las fechas que se aproximan.

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Estas fotos las saqué en una conocida cadena de panadería / pastelería que se llama «Saint Honore», en la cual suelo comprar algún bollito para desayunar cuando voy de camino a la oficina en una de las muchas tienditas que podemos encontrar a la salida del propio metro en una ubicación inmejorable a los ojos de muchos viajeros. Es un buen reclamo.

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De momento no ha caído ningún mooncake en mis manos pero seguro que en las próximas semanas no lo descarto. Sólo de pensarlo ya me estoy empachando, porque el tradicional no está hecho para que uno se puede comer uno entero, yo creo que el bienmesabe palmero tiene un buen rival, jeje. De elegir me gusta más la variante «snowy» o helada, son más fáciles de digerir y tiene sabores interesantes como mango, fresa, chocolate o té verde. Lo que son los gustos que se van adaptando con el paso del tiempo y las nuevas generaciones.

Dulce otoño

Sobre estas fechas llega una celebración muy especial dentro de la festividades chinas, concretamente el Festival de Medio Otoño y del que he hablado en blog en varias ocasiones. El año pasado por estas fechas descubría que no todos los mooncakes son iguales. En la foto tenemos dos tipos:

– El clásico de pasta loto (a la izquierda)
– Los otros dos de huevo.

Y aunque ambos llevan huevo, el primero lleva una yema en el medio, en cambio el otro es como una crema y la textura es suave frente al otro que es algo más compacto.

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Creo que mi preferido pasará a ser el de crema de huevo (egg custard). Y este año no ha sido del Mandarin Oriental sino de una cadena de pastelerías bastante conocida: Saint Honore. Todo hay que decirlo que bastante bueno y debido a su tamañito algo más pequeño se hace más fácil digerirlo.

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Es el equivalente a cuando nosotros estamos en Navidades y no paran de circular los turrones de un lado a otro. Es una costumbre que la gente se regale cajas de mooncakes, en los preparativos que empezaron hace 1 mes y pico, más ahora que son las vísperas y estamos a pocos días.

Aprovecho también para comentar que será un fin de semana largo porque el lunes se celebra el Día Nacional de China y al día siguiente que es festivo también, el día posterior al festival de Medio Otoño. Así que mucha gente aprovechará para salir de la ciudad con este puente largo y escaparse por los alrededores o bien pasar tiempo con la familia durante estas festividades.

Una vez pasados estos días todo vuelve a la normalidad y uno podrá ponerse en forma de nuevo para quemar los excesos de tanto dulce. Ya estoy viendo los gimnasios la semana que viene, no falla. Aunque seguro que los que tengan más suerte hasta se hacen un mega-puente hasta el lunes 8, no es mi caso, jeje, mejor aprovechar un poco de tranquilidad y descanso.