Volvimos a Osaka

Después de cinco años desde la última visita, volvimos a Osaka. Justamente fue el segundo destino cuando las niñas tenían poco más de un año después de haber ido a Tenerife un par de meses antes.

Lo que sería mi cuarta visita a la ciudad y la estancia de mayor duración. Con ganas de recorrer de nuevo sus mercados..

La popular zona de Dotonbori y su multitud de establecimientos para disfrutar takoyaki, okonomiyaki, ramen o izakaya. Hay donde elegir.

Y si queremos ocio: karaoke, juego de dardos..

Para que sirva de aperitivo, unos pinchos para abrir boca.

Fue un viaje bastante completo y con tiempo para patear, ir de parque de atracciones, descansar y hacer algunas compras.

En un próximo post les contaré algunos detalles más de lo que dio de si. Espero que me acompañen 🙂

El parque de las ciencias

Un espacio que no sólo sirve como lugar de trabajo sino que es el sitio perfecto durante el fin de semana para disfrutar de un paseo. Unas muy buenas instalaciones con las que cuenta el parque de las ciencias en la zona de Tai Po.

Mientras que durante la semana es un lugar ajetreado donde se concentran empresas de carácter tecnológico, muchas startups principalmente. Cuenta con espacio de sobra donde poder relajarse y disfrutar del bueno tiempo (sin chaparrón mediante)

Y sin nos gusta más la zona al lado del mar, en Tolo Harbour, con vistas a las montañas de Ma On Shan o Pat Sin Leng.

Para llegar desde Fanling está bien conectado con minibus desde el centro de Tai Po o también ir en taxi. Una opción seria ir en tren primeramente y luego hacer una segunda conexión.

Y si nos gusta ir a correr o en bici es un trayecto muy bueno para estirar las piernas, unos 5-6kms desde la estación de metro de Tai Po o bien 2kms desde la parada de Universidad.

Ni que decir que el ecosistema de startups en la ciudad ha crecido y sigue creciendo cada año. Da gusto contar con unas instalaciones de nivel donde disfrutar del aire fresco y lugar para el esparcimiento.

Cielos azules

Desde por la mañana el día nos recibe con cielos azules, y yendo de camino al trabajo es una alegría. Pasar por el parque de camino a la estación de tren y disfrutar de ese calorcito veraniego.

Y los días que me escapo a la montaña en una de las rutas cercanas. Esta panorámica del valle de Tai Po nunca pasa de moda 🙂

Pero tampoco se crean que ha sido sol a raudales desde que empezó el verano. Hemos tenido días y semanas con buenos chaparrones. Poco refrescar y como se suele decir, al final para más calor.

Días espectaculares con las vistas de la isla de Hong Kong y Kowloon (desde la planta 46 del Central Plaza)

Hasta que empieza a caer el día y parece que el sol da más tregua, con permiso de la humedad. Aún nos queda medio julio por delante y confiemos que Agosto se comporte.

De momento sólo llevamos un tifón en lo que va de temporada. A ver lo que da de sí hasta finales de Septiembre o casi entrado Octubre.

Que tengan buen finde allá donde estén.

Tomando un descanso

Algo pasa en torno al mediodía cuando vemos más actividad de la habitual, bien sea en una de las pasarelas que conectan edificios o a pie de calle. La hora del almuerzo se va acercando y la gente está tomando un descanso previo a la hora de comer; es el momento de socializar.

Los grupitos

Si siguen mi cuenta de Instagram seguro la imagen siguiente les resulta familiar.

Los puntos de encuentro en la calle siempre son más fáciles. necesito un descanso

Es el momento perfecto para lo que quieren disfrutar de ese cigarrito de media mañana.

La horas críticas son entre las 11.30 a 13.30. Es por eso que mi hora habitual de almuerzo está más próxima las 2; de esta forma me evito las colas y aglomeraciones.

Vuelta a la normalidad y cada uno para su oficina. Nos vemos en el próximo descanso. Bien seguro que los fumadores se verán las caras unas cuantas veces más al día, pero para el resto no llegará el momento hasta previo el almuerzo. ¿Ustedes se toman descanso antes de ir a comer? ¿quizás después? creo que ayuda a ser más productivo y a despejar la mente. Yo como buena práctica intento estar no más de una hora delante del ordenador. Ir a la cocina a tomar agua, recoger papeles impresos de la copiadora principal o ir a echar unas cartas.