Una leyenda

 

Hoy se cumplen 70 años del nacimiento de una de las leyendas de las artes marciales. Quien sino otro que el gran Bruce Lee (李小龍). Hasta la propia Google se rinde ante él y ha querido aportar su granito de arena en esta fecha tan señalada.
 

Seguro que si miramos por twitter y resto de redes sociales hoy habrá sido uno de los tópicos principales de discusión. Desde este blog, dedicarle una entrada que se la merece como símbolo de la ciudad de Hong Kong y en el mundo de las artes marciales. Marcó un antes y un después con su filosofía de vida y su estilo explosivo que ha marcado a tanta gente alrededor de todo el mundo.

A pesar de que nos dejase el 20 de julio de 1973, su legado sigue muy presente. Gracias por todos esos buenos momentos que nos hiciste disfrutar en tus películas, quedarán siempre marcadas en nuestra memoria.

Una leyenda que sigue más viva que nunca.
 

 

Pequeño dragón

Para muchos el título de esta entrada les resultará más que familiar, aunque puede que otros no le suene tanto. Aprovechando que hace poco escribía sobre la peli de Ip Man, maestro del personaje que nos ocupa a continuación. El gran Bruce Lee.

Dando una vuelta por Tsim Sha Tsui bordeando la cosa en la bahía de Hong Kong, nos encontramos con la «Avenida de las Estrellas». Un paseo por lo más destacado del panorama del cine y las artes en la que descubrir los personajes más celebres de Hong Kong. No podía faltar la figura de «el pequeño dragón», símbolo de las artes marciales y referencia de la ciudad con sus películas de alcance internacional.

La estatua levantada en su honor, luce desafiante con el fondo característico de esta ciudad de gigantes del asfalto. ¿Qué diría el propio Bruce sobre los rascacielos que cubren la panorámica de la isla? a muchos les gustaría que estuviera aquí para continuar disfrutando de sus espectaculares movimientos y seguir con sus teorías.

Ni que decir el realismo de la estatua. Los que hayamos visto sus películas, tendremos grabadas en la mente escenas de algunas de sus peleas. Fibra en estado puro.

No podía faltar su correspondiente estrella en el paseo, lástima que no haya podido plasmar sus manos e inmortalizarlas.

Y como quien no quiere la cosa, han pasado más de 35 años desde que dejara el mundo de las artes marciales, y con él, miles de seguidores que lo siguen recordando y comparten sus ideales.

Un grande de Hong Kong que siempre será recordado.