Se trata de un pueblecito que hace muchos años su actividad principal se centraba en las minas de oro. Su esplendor durante el periodo de dominación Japonesa, pero una vez el oro agotado, su popularidad fue decayendo hasta que un tiempo más tarde fue de nuevo descubierto como lugar turístico. Bastante bien conservado y lo curioso de ver las casas encaramadas a los lados de la montaña.
A pesar de que el tiempo no estaba muy allá que digamos, se podían divisar unas buenas vistas de las montañas con el mar a lo lejos.
Nos encontramos con callecitas estrechas pero repletas tanto de tiendecitas como restaurantes o puestecitos donde ir probando comida de todo tipo. Al principio, nada de gente, aparentemente todo tranquilo…
Una de las cosas que probamos: pinchos de setas. Y un plato muy simple, poner las setas a la parrilla, mojarlas con una salsita (creo que de soja) y un toque picante al gusto, luego troceadas y a pinchar, el aperitivo está listo. ¿El precio? de risa y riquísimas. Tanto nos gustó que repetimos 🙂
Seguro que no viste a casi ningún occidental por ese pueblo. Parece un lugar turístico tan remoto que por si fueran pocos los turistas extranjeros que van a Taiwan, dudo que alguno se acerque por allí…
Pues contados con los dedos de una mano, muy escasitos los extranjeros. Diría que en su mayoría del mismo Taiwán, China y Hong Kong.
Felicitaciones x el blog! Relatas muchos detalles y siento como si ya lo estuviera viviendo alla. Yo estaré viajando la primera semana de febrero ni bien me confirmen mis vacaciones y te agradecería si pudieras contarme si la vida en hong kong es muy cara? ya que pienso quedarme el mayor tiempo alli, y pues China es muy grande para recorrerla en tan poco tiempo, asi que, que lugares me recomiendas visitar? Muchas gracias x toda tu ayuda 😀