Se pensaban que después de haber visitado Wong Tai Sin el amigo Flapy y yo nos quedaríamos sin ganas de seguir visitando cosas. Ni mucho menos, fue tan sólo la visita inicial pero después vendría el sitio estelar del día. Entre un sitio y otro hicimos una pequeña pausa y a la vez que dimos un paseo, casi se puede decir que estaban al lado. En realidad es un paseo de unos 15-20 minutos pero después de habernos bajado en la parada de Diamond Hill, quedaba mucho mejor el ir caminando que coger el metro para hacer tan sólo una parada. Y por el camino cogimos algo más de refrigerio que ya andábamos escasos.
Los jardines de Nan Lian fueron inaugurados en el año 2006 y el estilo de sus jardines son del estilo de la dinastía Tang. Está todo muy bien ambientado y cuidado, desde los caminitos, la vegetación y sobre todo las construcciones donde destaca este pabellón dorado en medio de un estanque de agua.
No da la impresión de que estemos en Hong Kong verdad? tiene hasta un cierto toque japonés, me atrevo a decir. Sólo al levantar la vista nos damos cuenta de la presencia de los altos edificios de viviendas, pero de resto sólo escuchamos la música ambiental que suena por la megafonía y el canto de algunos pajaritos que saltan de rama en rama.
Tampoco faltaba una sección de bonsais inclusive. Muy verditos y súper cuidados.
Por supuesto las fotos no pueden faltar y esta era una de las zonas preferidas. Estas chicas estuvieron un buen rato poniéndose en turnos, hasta que pudimos captar nosotros la panorámica.
Nos vamos alejando escaleras arriba en dirección a la otra zona del complejo: Chi Lin Nunnery, siendo la zona que daría pie a todo el complejo. Originalmente del año 1934 y posteriormente renovada en el año 1990. Muchos años más tarde llegaría el jardín de Nan Lian que hace de antesala perfecta.
Disfrutamos mucho de la visita, foto aquí y foto allá. Creo que a Flapy no le importaría repetir 🙂 aún tengo pendiente que publique su versión de ese día de paseo, seguro que sólo es cuestión de tiempo.
Es una maravilla contar con sitios como estos a los que escaparse de vez en cuando. Son un oasis en medio de tanta verticalidad, lugares para bajar el ritmo mientras uno se relaja con el entorno. Seguro que no lo conocían y poder acercarles un fisquito más del otro Hong Kong.
Antes de que me olvide, su ubicación es al yendo de camino hacia la estación de Diamond Hill saliendo desde Wong Tai Sin, no tiene pérdida.
Una visita muy recomendable cuando se viene a Hong Kong, sin duda. Los jardines están muy bien cuidados y el pabellón dorado es muy llamativo.
Ha sido todo un acierto que pusieran unos jardine así de bonitos y restaurando también convento integrándolo en un solo recinto. Me pregunto cómo sería en los años 30 cuando apenas llevaba unos años en pie..mmm, tendré que buscar cositas al respecto.
Parece un sitio muy agradable, fijo que si viviera allí sería de mis lugares favoritos.
A pesar de ser un domingo cuando fuimos, puedes ver que no hay demasiada gente aunque era casi última hora porque los jardines cierran a eso de las 5-6 de la tarde, aún así los pudimos ver bien pero no descarto el repetir, seguro.
Para pasear son ideales. Y por lo general la zona de los alrededores es bastante agradable, verdita y parece tranquila para vivir.
Y encima con el tío Flapy acompañando en los platos! Buenas fotos Javi! 🙂
Un compañero de lo más majo, ya lo sabes bien. Siempre es un alegría tenerle de visita por la ciudad, y esta vez recorriendo sitios nuevos para los dos. Gracias tío Chiqui!
De todo lo que vi en nuestro viaje a Hong Kong, creo que estos jardines fue lo que más me gustó. Los visité el último día y con algo de prisa, pero me pareció un lugar precioso y muy agradable para pasar un par de horas paseando tranquilamente.
Me alegra que también lo pudieran descubrir durante su viaje. Es un lugar que creo no está demasiado explotado, en parte mejor así, y muestra una visión distinta de la ciudad, mucha paz en su interior.