Si tuviéramos que decir de uno de los ingredientes más usados en la cocina cantonesa, este sería el jengibre. Sobre todo, cuando más la atención me ha llamado su uso es en la cocina casera, porque lo que es en restaurantes, digamos que su presencia no es tan fuerte. De cuando mi novia cocina o hemos ido a casa de sus padres a cenar, siempre aparece el jengibre en alguno de los platos. Es como yo lo llamo: «la cebolla china», y es que como ya saben todos, en la cocina española no hay plato que se precie donde no falta un sofrito con cebolla y/o ajito, verdad?
El sabor ligeramente picante que tiene, le da un toque interesante a las comidas. Especialmente con algunas carnes, como por ejemplo el plato de ternera de la foto siguiente. Aunque también «pega» bien con verduras o algún pescado guisado o en las sopas. La verdad que tiene una pinta tremenda este plato 🙂
Y a parte de los usos culinarios como los que comentaba anteriormente, el jengibre también es muy útil a nivel medicinal y para tratar problemas de estómago, naúseas (en las embarazas), artritis e incluso para el resfriado común. No en vano, se lleva usando más desde tiempos remotos tanto para este fin como para la cocina.
Quizás en la parte occidental, el uso del jengibre no es tan habitual. Si que recuerdo de haber visto en las farmacias algunas cápsulas de jengibre que vendrían como anillo al dedo para aquellos que sufran un poco del estómago o algunas de las molestias que nombraba antes. ¿Lo han probado en algún plato? sino, a qué esperan..