Tierra canaria

 

Durante la semana pasada se ha estado celebrando una nueva edición de la Feria Internacional de Vinos y Licores de Hong Kong en lo que es ya su 3ª edición. Una feria bastante joven, pero que desde su comienzo empezó con fuerza y se posiciona como un referente para un mercado tan importante como el del vino y otras bebidas alcohólicas. La ciudad intenta hacerse un hueco en el mercado asiático y como punto de entrada para China continental y resto de países de la zona, una buena ocasión para que las empresas españolas se animen más que nunca a exportar sus productos y probar suerte en este mercado.

Es bueno ver que año tras año, no sólo en esta feria sino en otros eventos del sector, la presencia española siempre es importante y las empresas se esfuerzan por estar presentes. Hasta ahora había echado en falta la presencia de vinos de mi tierra, y ha sido este año cuando ha habido una representación de algunos de ellos en esta feria. Es una alegría desde luego, y aproveché para pasarme a curiosear un poquito.
 

Bajo el paraguas de Convican (Consorcio Vitivinícola de Canarias) venían agrupadas un total de 14 bodegas de varias islas (Tenerife, Gran Canaria, La Palma, El Hierro y Lanzarote). Algunas marcas que ya conocía como Monje o Viñátigo, y algunos nombres nuevos que siempre es bueno ver. Es un muy buen primer paso para que los vinos canarios se abran paso en el tan competitivo mercado del vino, y más en Asia con tantos consumidores potenciales. Un servidor estaría encantado de tener representación de algunas marcas para comprar tanto en tiendas especializadas o a la hora de ir de almuerzo o cenita.
 

De los vinos que ven en la foto, pude probar «Frontos», un blanquito de ligero toque seco y elaboración ecológica. Además, pude conocer de la mano de Pablo, uno de los representantes en el stand, algunos de los detalles de la elaboración, siendo él mismo productor de este vino y en colaboración con otras bodegas. Le agradezco el ratito que me dedicó para charlar acompañado de un vasito vino con un poquito de queso, estuvo del diez.
 

A la cita tampoco faltaron los vinos tintos y algún que otro vino dulce como este que vemos en la foto al fresquito de unos hielos. Ya tengo en mente para la próxima vez que esté de vuelta por casa, el probar algunos vinitos más que tengo acechados 🙂
 

La feria se dio por terminada el sábado. Ahora queda esperar a que saquen conclusiones, espero que positivas en su mayoría y para el año que viene puedan repetir experiencia con al menos las mismas bodegas o aumentar más aún si cabe la variedad. Espero que la gente de Convican se vaya de vuelta a casa con buenas vibraciones y ahora sólo queda esperar a ver los resultados en meses posteriores. Si vienen el año que viene, la visita está asegurada por mi parte.