Como en toda ciudad que se precie, hay edificios que llevan bastante tiempo en pie y claro, hay que cuidarlos más para ver que su salud, y sobre todo la de sus ocupantes, no corre peligro. El caso de Hong Kong, donde se produce un gran contraste entre modernos rascacielos pegaditos a bloques de edificios de aspecto sucio y deteriorado. Impacta bastante, especialmente en la zona de Kowloon.
Foto de Flickr
Y aunque no pasa a menudo, menos mal, este fin de semana nos encontrábamos que el sábado un edificio se derrumbaba por completo en la zona de Hung Hom, relativamente cerca a la conocida zona de Tsim Sha Tsui. Por lo visto se estaban llevando a cabo unas obras de renovación en un local situado en el bajo del edificio, pero aún tienen que concluir si fue esto el origen del derrumbamiento.
Foto de Shanghai Daily
A pesar de los daños materiales, también se ha tenido que lamentar el fallecimiento 4 personas, además de afectar a los edificios de los alrededores, aunque prácticamente se cayó en el sitio. Rápidamente esto ha hecho levantar las alarmas para que se revisen cientos de edificios que ya pasan la barrera de los 50 años, y evitar que suceda esto de nuevo.
Aunque por lo general los organismos son muy previsores y están pendientes de aspectos sobre las viviendas, la seguridad, salud pública… parece que no es hasta que paga un suceso como este en el que se movilizen más para velar por la seguridad de los edificios y las personas.
¿Pasa algo parecido en sus ciudades? Seguro que más de una ocasión habrán pasado por alguna calle donde hay un edificio que no se encuentra en buenas condiciones, pero mientras aguante dirán algunos… Hay que prevenir para luego no lamentar, no?