Como toda ciudad que se precie, tienes sus cosas buenas y malas. Algo que destacaría, es el andar de la gente. En lo que respecta a modales, la gente sabe comportarse como puede ser en una fila pero a la hora de andar «libremente» por la ciudad, las cosas cambian y diría que muchos/as no saben cómo comportarse mientras caminan.
Yo por lo general será que voy con ojos por todos lados por lo que pueda pasar a mi alrededor, pero parece que la gente de Hong Kong por lo general no tiene en cuenta su alrededor y es como si se olvidaran de que hay más gente por la calle. Entre ellos, he visto más de una vez que se tropiecen por coincidir la dirección de ambos, aunque eso le puede pasar a cualquiera. Típica es la situación en la que vamos caminando y nos «encontramos» con alguien de frente y no sabemos hacia que lado ir para esquivarlo, a veces llegado un punto que ambos se paran para ver hacia donde sale cada uno, jeje. La de veces que me habrá pasado 🙂
Para prevenir a los que estén sólo de paso por la ciudad, estén atentos a los cambios bruscos de dirección o frenazos en seco de los demás peatones, no les vaya a pillar por sorpresa aunque aún sabiéndolo, estas acciones pueden ser de lo más aleatorias. Yo que llevo ya un tiempo por aquí, hay veces que no dejo de sorprenderme con los «volantazos» de la gente que tengo en frente o a mis alrededores, por lo que eso de ir con mil ojos no viene de más. Yo me lo tomo con humor desde luego, porque no hago nada cogiéndome una calentura así como así pero cada uno tiene sus días, verdad?
Desde luego, no viene más al pego el título de esta entrada. Luego no digan que no les avise, porque la gente es de lo más imprevisible. Espero que se lo tomen con filosofía, porque a veces hace falta de verdad. Se los dice un «hongkonés» más.
A mi me encanto como se movía la gente con los paraguas, algo nada fácil, en una ciudad tan llena la gente abría y cerraba su paraguas para dejar pasar a los demás.
Algunos/as si que saben manejarse con el paraguas pero otros en cambio creo que son algo torpes. Te ven con el paraguas y no se molestan en levantarlo, y claro asi no veas los choques o arriesgando a que se lleven los ojos de los demás, grrrr…
Se ve que yo tuve suerte, o que la comparación les favoreció 🙂
Ganas tengo de volver a poner los pies alli!!!
A ver cuando se dan una escapadita de finde para revisitar estas tierras. Ahora que aprieta el calor y nos vienen tifones de vez en cuando, igual no, pero más adelante que se esté más fresquito 😀
En un sitio con tanta gente eso acaba por ser inevitable… Si donde yo vivo ya hay veces que «cuesta» andar por la calle imagínate en HK!! jajajaj
Entiendo que debido a la acumulación de gente, a veces este tipo de comportamiento sea digamos normal, pero incluso cuando te encuentras en zonas menos transitadas, te puedes esperar un giro brusco o un frenazo en seco, o como decía nuestro amigo @dragox que pasa en Londres, trazar un línea recta y sin importar con quien se crucen en el camino, nada de mirar a los lados, y eso tampoco puede ser que uno no va solo por la calle