Después del viaje a Japón, que tengo pendiente de ir contando, no quería dejar pasar la ocasión de ver la celebración del festival Tuen Ng que tuvo lugar este pasado domingo. Siendo al día siguiente festivo en Hong Kong con motivo de esta celebración.
Este festival chino del barco del dragón es un día de fiesta significativo celebrado en China y la que está con la historia más larga. Este festival, también conocido como festival del Ng de Tuen, conmemora la muerte de un héroe nacional chino popular, el Qu Yuan, que se ahogó en el río bajo de la milla sobre hace 2.000 años para protestar contra las reglas corruptas. La leyenda dice que como los ciudadanos procuraron rescatarlo, batieron los tambores para asustar pescados lejos y lanzaron las bolas de masa hervida en el mar para guardar los pescados del cuerpo el comer Qu Yuan.
Me fui hasta la zona de Stanley, en el sur de la isla, donde durante todo el día se vinieron celebrando las tan conocidas carreras de botes.
Los barcos especiales, que miden más de 10 metros, han tallado adornado y las cabezas y las colas pintadas del «dragón», y cada uno llevan a equipo de 20-22 paddlers. El casco se adorna típicamente con un diseño de las escalas del rojo, verdes y del azul afiladas en oro.
Nada más llegar de coger la guagua que te lleva desde la zona de Central hasta justo al ladito de la zona del mercado en unos 20 minutos, éste era el ambiente que uno se podía encontrar por la calle. Era mi segunda vez en Stanley, pero sin duda, las celebraciones hacían que estuviera más animado de lo normal.
Y el ambiente en la zona de la playa, espectacular sin duda. Entre espectadores, participantes en las carreras y demás público en general, el número de gente era importante, aún así, se podía estar sin agobios y disfrutar del ambiente festivo.
Los equipos participantes algunos haciendo el calentamiento previo a las carreras, más vale prevenir. Y luego, todos al agua y listos para una de carreras. La gente expectante, incluso desde los barcos allí atracados seguían las carreras con interés.
Un día de domingo diferente, disfrutando de calor y playa. Aunque el tiempo no estaba del todo soleado, el calor apretaba e invitaba a que la gente se refrescase en el agua y mientras los más pequeños aprovechaban para jugar en la arena.