El yo-yo

 

¿Quién no conoce este popular juguete? Cualquiera de nosotros ha jugado con uno de ellos siendo bien niños o incluso de no tan niños. Un sencillo juguete pero que al principio para cogerle el truco, hay que dedicarle un poco de tiempo y en especial si siendo niños tenemos manos más chiquitas y no tan hábiles.

Recuerdo que los solían regalar en las promociones de verano con algunas marcas. De colores: rojo, azul, blanco o también transparentes y con distintos logos. Por casa seguro que tendría unos cuantos, y ha sido no hace mucho que me encontrase uno al estar con mi novia en casa de sus padres y con su sobrina, que tenía uno por ahí entre sus juguetes. Una versión mucho más moderna y con el look como de llanta de coche.
 

Y si nos remontamos a sus orígenes, seguro que muchos coincidimos en decir que proviene de China aunque parece que algunos dudan y puede que también en la antigua Grecia jugasen con él. Sin embargo, lo más probable es que se iniciase en el continente asiático hace muchos años y ha ido evolucionando con el paso del tiempo, introduciendo modificaciones en su diseño pero fiel a su principio: entretener tanto a peques como adultos y pasar un rato divertido.

El yo-yo incluso ha dado para hacer competiciones donde demostrar lo habilidoso que puede llegar a ser uno con este juguete entre sus manos.
 

Sino vean el siguiente vídeo. increíble!

Lástima que el uso del mismo no es el de años atrás. Los tiempos cambian y las formas de ocio evolucionan, díganse: Nintendo DS, PSP… pero creo que es bonito disfrutar de un juguete más puro para sacar el lado más creativo.

¡Qué tiempos aquellos del trompo o los boliches! Esos recreos en el patio del colegio, memorias imborrables.

 

Ir a China

 

Aprovechando que este viernes era festivo por el día de HKSAR, mi novia y yo fuimos tempranito por la mañana a China al pueblo de sus padres. ¿Qué implica eso? a parte del madrugar, toca coger el metro y el correspondiente tren con estación final en Lo Wu..
 

El paso por inmigración es rápido, lo que facilita las cosas teniendo el ID card de Hong Kong, pero una vez en el lado continental no nos libramos de rellenar el papelito de entrada. Justo el otro día mirando la visa, tengo hasta noviembre, así que, tendré que aprovechar y hacer algunas visitas más para amortizarla 🙂

Pasar a modo roaming y desconectar los datos del teléfono, no vaya a ser que luego la factura y recibir mensajitos de tu operador para llamar barato a números de HK. Un cambio en el paisaje que nos rodea: los edificios, la gente, las calles… para lo bueno y lo malo. El cambio del hong kong dólar al yuan. A veces un poco de caos en el tráfico, pero sorprendentemente nunca he visto un accidente ni he sufrido ninguno (tocamos madera), creo que sus habilidades al volante no tienen límite.
 

Paredes decoradas con carteles que anuncian licores o bebidas refrescantes que tienen un parecido en color y forma de botella a la coca-cola, esta en concreto es un té que creo haber probado en su versión en lata y bastante popular, allá donde vayas puedes encontrar anuncios por la calle o en las tiendas.
 

De vez en cuando, tropezarse con símbolos curiosos en los talleres de coches. Yo diría que el logo de BMW en la parte azul debiera ser un poco más curvada y no a modo de triángulo.. interesante
 

Está bien salir del entorno habitual y estar más desconectado durante un par de días, aunque eso de dormir, comer y ver la tele, al cabo de segundo o tercer día se termina haciendo un poco monótono. Espero que si progreso con el cantonés pueda comunicarme un poco mejor con los mayores o sino al menos con los pequeños de la familia. Mientras tanto sonreír y soltar algunas palabritas de agradecimiento.

Entretenerse sacando fotos por aquí y por allá. Esta vez no llevé la reflex porque sólo era para apenas dos días y la zona la conocía, aunque son esos momentos en los que siempre pueden pasar cosas inesperadas, ¿no les parece?

¿Para cuando la siguiente escapadita continental? igual en otro finde puede que caiga.

 

Cestitas

 

¿Quién no ha comido dim sum? algo que debemos probar si venimos a Hong Kong. Una gran cantidad de platos donde elegir y que luego se comparten en la mesa con el resto de comensales. Por lo general, las cestitas contienen 3-4 unidades o sino con un platito en su interior cuando lleva algo de salsa, como puede ser el plato que vemos en primer plano a la izquierda. No faltan los dumplings de gambas, de verduras o «char siu bao».
 

¿Y se había preguntando de qué material están hechas estas cestitas? en efecto, se usa madera de bambú para darles forma, ya que, este tipo de madera evita que se condense la humedad y mantenga en buen estado la comida desde que sale de la cocina hasta que llega a la mesa. Además, se le añade en el interior unos anillos de metal para reforzar la estructura aunque también nos las podemos encontrar fabricadas íntegramente en bambú. Un ejemplo más de lo versátil que puede ser el bambú, desde su uso para la fabricación de andamios hasta su uso para la elaboración de estos recipientes tan usados hoy en día.

A día de hoy, seguro que el proceso de manufactura de estas cestitas se habrá modernizado pero hay gente que prefiere ser fiel al método más tradicional. Como muestra, aquí tenemos algunos de los tamaños más habituales.
 

No sé si recordarán cuando la semana pasada les mostraba una de las cenas de nuestro viaje a Penang, me llamó la atención que todo el dim sum que servían venía en recipientes metálicos. Eso sí, el calor lo conserva más por lo que la señora debía hacer uso de una pinza cuando iba sirviendo por las mesas.
 

En casa también podemos hacer la prueba a intentar cocinar con una de estas. El proceso es sencillo, ya que, la comida que se pone en su interior se cocina al vapor. Basta con colocar la cestita encima de un recipiente con agua, que el agua empiece a hervir y dejar que se cocine. Ya sólo nos queda llevarlo a la mesa y disfrutar de un rico dim sum 🙂

 

El presupuesto

 


Como cada año toca hacer cuentas y ver el presupuesto que se va a manejar durante el presente año y parte del año próximo. Recortes por aquí, otros por allá y claro, al final las cifras no están a gusto de todos. Ante todo, beneficiar a los que más lo necesitan.

Una de las medidas que se adoptaban era la de beneficiar con 6.000 HKD (600 € aprox.) para el fondo de pensiones (MPF), con lo que el gobierno de Hong Kong se gastaría una cantidad total de 24 billones de HKD. Esta medida conseguiría reducir en parte la inflación, aunque a veces no se menciona todo lo que se debiera, y aliviar a aquellos a los que está destinada esta ayuda que son principalmente los pertenecientes a la clase media.

No sé si en otras ocasiones habré comentado, a pesar de ser una ciudad bastante moderna y con muchas facilidades, no todo está al alcance de todos. La diferencia de clases es un elemento que siempre está presente en la sociedad y el salto entre la clase media-baja a las clases altas es muy grande.

Otra de las medidas de efecto inmediato fue la subida en 10 HKD (1 euro) en el precio del tabaco. Recientemente uno de los lectores del blog, Pablo, me preguntaba sobre el precio de los cigarrillos, aunque por sí mismo según me comentaba pudo comprobar que el precio variaba un poco de una tienda a otra. A partir de ahora, aquellos fumadores se lo pensarán más a la hora de comprar la siguiente cajetilla. Por lo que leía en las noticias, ahora el precio se sitúa en torno a casi 5 euros aunque imagino que también dependerá de la marca y/o el tipo de cigarrillo. Una buena forma de ahorrar dinero si reducimos poco a poco el hábito de fumar, ¿no les parece?

Y por último, un tema que siempre está en boca de todos: las propiedades (venta y alquileres). El gobierno quiere evitar que se produzca una nueva burbuja inmobiliaria, aunque de hecho ya se ha formado pero al menos evitar que ésta siga creciendo y luego las consecuencias sean peores. Favorecer el acceso a la compra de viviendas mejorando las condiciones o acceder a las casas del gobierno que son un porcentaje bastante considerable del total de la población de la ciudad.

Tras los primeros signos de mejoría después de verse afectada la ciudad por la crisis económica mundial, uno de los índices que reflejaba esa mejoría, era el precio de venta y/o alquiler de las viviendas, incrementándose sustancialmente. Tampoco digamos que ayuda cuando vienen compradores de China continental con grandes sumas de dinero y capaces de comprar casi a cualquier precio, no se puede competir ante eso. Al final, los que salen perjudicados son el resto de ciudadanos que vemos como el precio sube demasiado rápido.

Veremos qué medidas se van tomando durante los próximos meses y si ayudan realmente algunas de las que acabo de mencionar anteriormente. Tiempo al tiempo.