Aunque ya había estado en Stanley un par de veces antes, y una de ellas con el motivo de la celebración de las carreras de botes dragón, aún no había tenido la oportunidad de estar por la noche. Es muy agradable de noche, sólo con pasear por la zona y disfrutar de la tranquilidad del ambiente. Añadir que la temperatura mejor aún que estando en el distrito de Central, corría una ligera brisita y eso se agradecía.
Sin duda, el edificio que más destaca es: Murray House. Data del año 1844 y es la edificación pública más antigua con la que cuenta Hong Kong en la actualidad. Inicialmente se encontraba situado en el distrito de Central, pero tuvo que ser trasladado con motivo de la construcción de la futura sede del Banco de China (1982). Se etiquetaron todos los bloques y posteriormente se propuso ubicarlo en Stanley. Fue en el año 1999 cuando se reabrió al público.
Actualmente cuenta con varios restaurantes en sus plantas entre ellos: vietnamita, español, alemán… y en su parte baja alberga el Museo Marítimo de Hong Kong.
En esta foto, podemos ver de fondo un pequeño muelle desde donde se puede coger un barco que nos lleva hasta Aberdeen, zona situada también al sur de la isla.
Vale la pena ir a Stanley, bien de sea de día para meternos por su mercadillo o de noche para pasear o cenar tranquilamente; conocer el otro lado de Hong Kong donde se respira otro ambiente, más verde, no tantos edificios y a tan sólo 20-30 minutos del centro. Solo unos pocos hoteles de Hong Kong se encuentran en esta área, pero se puede coger una guagua desde la estación central, las líneas): 260 (express), 6, 6x.