La locura del Año Nuevo Chino ya está casi encima como quien no quiere la cosa, la gente corre a aprovisionarse de productos de todo tipo bien sea para el consumo en casa con los familiares o bien para regalar a otros. Digamos que un mes antes o así, se empieza a notar la transformación no sólo en los supermercados sino también en tiendas de droguería (Mannings, Watsons y similares). Ya se podrán imaginar cómo es en los supermercados, montañas de más de 1,80m de altura y algunos pasillos que se estrechan un poco más de lo habitual, y muchas tentaciones a la vista jaja.
Las galletas y más productos llenan las estanterías y se apilan en montañas, hay existencias de sobra y bastante variedad donde elegir. Desde las clásicas galletas danesas de mantequilla, de chocolate o en forma de los populares Tsum Tsum, sino echen un vistazo a la foto siguiente.
No faltan barquillos, frutos secos…
Y no nos olvidemos de las latas de chocolates entre las que destacan marcas como Lindt o Ferrero. Casi como nuestra celebración de Navidades con los turrones; las cosas dulces no deben faltar en cualquier casa durante los días de celebración del Año Nuevo.
¿Ya se empacharon de los dulces? también hay hueco para productos como: abalone, noodles o setas «dong gu». La cuestión es no irse a casa con las manos vacías y en lo que miramos algún gel para la ducha o medicamento, podemos salir un poquito más cargados de lo habitual durante estos días.
Voy a tener que controlarme estos días en lo que a galletas y más cosas se refiere, y es que cuando uno va a China con la rutina habitual de comer, ver la tele, dormir y repetir el ciclo se pueden ganar algunos kilos; no puedo descuidarme porque la maratón de Tokio está a la vuelta de la esquina y ando ultimando los detalles de la preparación.
Una galletita no hace mal a nadie 😀
Desde luego que no, lo malo es cuando se repite la rutina durante varios días y uno no deja de comer yendo de una casa a otra, sentado viendo la tele y bebiendo té a saco jaja