Cerca de la frontera

Uno de esos sitios que ha pasado a ocupar un lugar especial durante mi rutina del fin de semana. Y es que estar cerca de la frontera y tener ahí de frente la ciudad de Shenzhen es algo con mucho contraste.

Los Nuevos Territorios es esa zona situada en la parte más norte de Hong Kong y que limita con el resto del continente. Una zona verde, con monte, con algunas casitas y zonas de cultivo.

Shenzhen ahí al ladito

Es como estar viendo el distrito de Central de la isla de Hong Kong. La gran urbe en la que se ha convertido nuestra ciudad vecina, la que era un experimento del gobierno hace poco más de 30 años.

Unos parajes bastante tranquilos y una carretera por la que pasa de vez en cuando algún que otro coche, ciclistas o gente corriendo como un servidor. Eso sí, en los días de calor mejor ir preparado porque el tramo (5-6 km) que va desde Lok Ma Chau hasta la zona del río cerca de Lo Wu / Sheung Shui, no hay puntos de agua; es mejor lleva extra e ir cogiendo los cachitos de sombra cuando se pueda.

Anda que no me hubiese dado un chapuzón en esta charca, pero a saber…

Tan sólo yo mi respiraci´ón y el sonido del campo. Apreciando los detalles de la naturaleza y los contrastes cerca de la frontera.

Mucho va a cambiar esta zona cuando terminen un nuevo parque tecnológico en San Tin (zona de Lok Ma Chau) pero siempre preservando el entorno natural tan valioso. Veremos cómo se mantiene el equilibro con el progreso. Hacer los proyectos sostenibles y respetuosos con el medio, eso que está ahora tan de moda, pero que es el futuro para las nuevas generaciones.

Museo de noodles

museo de noodles

Una visita diferente la que hicimos durante este pasado fin de semana al museo de noodles ubicado en Tsim Sha Tsui.

Y es que la conocida marca japonesa «Nissin» tiene un espacio donde poder conocer un poco más de cerca la historia de la empresa e incluso algunos talleres para elaborar sus noodles o bien decorar sus conocidas «tazas»

¿cuál elegirían entre todas estas?

Según nos cuenta uno de los paneles, es el año 1958 cuando se inventaban los noodles instantáneos. Hoy en día presentes en cualquier rinc´ón del planeta y que sirven de forma instantánea como reemplazo a una comida. Bien sea en casa, en un avión o en cualquier 7-11 que se precie.

En lo que hacíamos tiempo para el taller, nos sacamos algunas fotos y curioseamos en la tienda que hay a la salida. Por cierto, el coste de la entrada con el taller para decorar la «taza» es de 60 HK$ por persona.

Nos explicaron que sólo podíamos decorar entre las franjas doradas, nada en la tapa o en la parte inferior. Con media hora por delante y unos cuantos rotuladores de colores nos pusimos manos a la obra.

Un rayo McQueen ni tan mal

La gente observando el proceso de los noodles y su empaquetado

Aquí las nuestras listas con sus correspondiente hoja de ingredientes.

Toque final cuando pasa por una m´áquina que la sella y la ponen dentro de una bolsa para llevar colgada que inflan con aire. Souvenir curioso después de haber pasado un rato entretenido.

Ahora nos quedan los noodles para un momento de esos que nos veamos con un poco de hambre. Agua hirviendo, 3 minutos y listo! 🙂