Curioso es el aspecto de esta tienda que se hace llamar dispensario, aunque luego si nos fijamos puede vender cosas que se salen fuera de lo normal. Es lo que viene a ser una típica farmacia pero que mezcla la medicina occidental con los remedios chinos. El letrero suele venir en inglés y caracteres chinos, con el fondo en blanco y acompañado de un logo como con cuadraditos rojos y blancos.
Su aspecto suele ser con un mostrador a uno de los lados según se entra, y en un reducido espacio podemos ver colocados todo tipo de medicamentos. Aunque no sólo medicamentos sino desde leche en polvo para bebés que se encuentra al mismo borde de la puerta hasta tónicos para el pelo o rollos de papel higiénico (tema pendiente para un post). Un gran colorido que tienen todas las cajitas de los medicamentos, algunas son verdaderas filigranas y conservando un toque tradicional con alguna foto de su fundador. Un poco más abajo podemos ver en detalle una bastante curiosa.
Uno puede deducir por las siguientes imágenes que este medicamento es bueno para evitar a los mosquitos, conciliar el sueño o incluso para aliviar los dolores musculares. Aunque con la primera imagen no sabría acertar para qué se puede tratar. Es bastante común ver unos frasquitos como de «alcohol» pero de olor como mentolado que tienen todos estos usos, interesante la verdad.
Desde luego es un negocio que no pasa desapercibido. ¿Pedir un medicamento ahi? aún no he tenido la ocasión, quizás cuando mejore mi cantonés o sino, apuntando 🙂