A pesar de estar en otoño, parece que algunos días el calor no quiere abandonarnos y justo este domingo, aunque en las fotos no se vea muy soleado, el día estuvo más caluroso de lo habitual pero no por ello uno se iba a quedar en casa. En mente tenía haber hecho una rutita de hiking, pero finalmente decidí pasear por los alrededores de Tung Chung.
A pocos minutos de casa, podemos pasear cerca del mar y contemplar el aeropuerto que está justo en frente. A lo largo de ese paseo, hay un murito con pinturas muy curiosas. Y no es que sean unos pocos metros sino que diría lo menos más de 200 metros de muro, con algunas secciones tan sólo pintadas de color con algunas letras pero en cambio otras con dibujitos más elaborados.
Algunos tan simpáticos como este cerdito y un elefante esperando la guagua. Por lo que vi, la temática era reprensentar algunos valores como la amistad, amabilidad, respeto al medio ambiente…
Y tampoco olvidarnos de llevar una vida sana, comiendo bien y haciendo deporte.
Mirar la vida con optimismo y no perder la sonrisa. Imagino que a los niños o igual no tan niños les habrá llevado su tiempo pintar todo esto, pero la verdad que es un buen trabajo que queda para la posteridad. Me pregunto cuándo habrá sido pintado, no me dí cuenta si había alguna fecha puesta por algún lado.
Seguimos caminando y vemos el puente que conecta hacia las terminales, por donde pasa el Airport Express y los coches. Y de fondo vemos el teleférico que se eleva entre las montañas de Lantau.
Vamos a seguir caminando otro poquito y alejarnos de vuelta al centro de Tung Chung, pero aún el día daría más de si, me lo guardo para una próxima entrega, sigan atentos.
Me suena mucho ese teleférico 😉
Y tanto! al ladito de mi casa, jeje. Como ves, el día no estaba especialmente clarito. Creo que las vistas no serían del todo buenas, pero no veas la cola de gente que había y es que siendo domingo…
🙂 Qué simpático! Aquí también hay varias cosas como esta. Recuerdo que cuando era pequeño, en el colegio nos encargaron pintar una de las paredes del patio a los niños y quedó super chula! Y luego pintamos un muro muy grande que había en una calle justo a la puerta del colegio. Es una forma de decorar paredes que de otra forma serían un muro triste y feo y así son divertidos y además implicando a niños que se lo pasan bien 🙂
Seguro que si fuera más tipo graffiti la gente pensaría que no es «arte» sino más vandalismo. No es que así lo crea yo, porque para hacer cosas a golpe de spray hay que saber. Pero estos murales seguro habrán servido como actividad extraescolar para algunos peques, dar una nota de color y pasarlo bien.
Me pregunto si en tu cole seguirá ese mural que comentas, sería interesante que lo compartiera. Se me ocurre 🙂
Pues ahora ya no está el mismo… con el tiempo se estropeó un poco y pintaron encima pero es más «profesional» jajaja Pero se me ocurre que igual es interesante hacer un post de graffitis que los hay buenos en Gijón…
Lo de los graffitis también mola mucho, hasta igual podríamos hacer un post conjunto y buscar cosas en nuestras respectivas. Veremos si sale algo 🙂
Bonitos murales !!!! aunque no se porqué me imaginaba que los dibujos serían tipo manga.
Seguro que en algún rinconcito de la ciudad doy con alguno más radical y con manga como comentas. Si diese con alguno, me lo apunto para compartirlo.