Relax

Estarán de acuerdo conmigo que nada más relajante que contemplar como se va acercando el atardecer. Ver como el cielo va adquiriendo distinto tonos, el sol se mezcla con las nubes, poder parar el tiempo…

La gente aprovechando para jugar al frisbee, pasear, darse un chapuzón…

Las últimas horas del día antes del anochecer, gente en el agua disfrutando de los últimos rayos de luz del día y perdiéndose a lo lejos.

Otro día que termina dejándonos puestas de sol tan impresionantes como esta. Junto con la isla de Tioman y aquí en Boracay, de las mejores que haya visto. Aunque la foto pueda captar ciertos detalles, merece la pena vivirlo en persona, aissss…. que ganas de estar allí 🙂

Y este finde ha sido totalmente relax, ya con energía renovadas para el comienzo de una nueva semana.

¡¡Buen inicio a todos!!

Pisando Boracay

Las imágenes hablan por si solas no? tampoco quiero ser malo y dar envidia, aunque quizás un poquito, jeje 😛 Y efectivamente son de la isla de Boracay en Filipinas. Juan acertó cuando lo calificó de paraiso, y sin duda, es un lugar espectacular, tanto por el color del agua, lo fino de su arena y la tranquilidad que se respira.

La playa principal de Boracay se llama White Beach, situada en la parte oeste de la isla. Lugar donde se concentra mayor parte del turismo que llega a la isla. ¿Quién se apunta? 🙂

Sin duda, el tiempo me sonrió durante mi estancia en la isla, algo que se agradece, aunque las semanas anteriores a mi viaje, algún que otro tifón había venido rebotado de Filipinas hasta Hong Kong y me hacía temer lo peor. De las mejores playas en las que haya estado por Asia junto con Tioman.

Un privilegio el poder conocer lugares como estos y luego disfrutar el recordar de ellos.

La poli..

Repasando las fotos del viaje que hice a Japón a principios de Junio, me encontraba con esta que tomé durante mi estancia en Nara. Hay que ver como se las gastan los coches de policía japonenes, nada más y nada menos que un Suburu Impreza. Que yo me fijara, ni en Tokyo se gastan estos cochitos, o si Beñat? Si lo comparamos con los modelos que nos gastamos en España, los nuestros se quedan en ridículo,jeje…

Que pena que por aquel entonces no pudiera coincidir con Flapy por Nara, pero como también iba justo de tiempo y el hombre parece que estaba liado, pues no pudo ser. Queda pendiente para un próxima eh! 😉

Por cierto, perdonar mi ignorancia, lanzando mi pregunta para mis amigo de Japón: ¿a qué tipo de cuerpo representa este coche: local, de carreteras, nacional..? A modo de curiosidad.

Camboya Night life

Algo que no me esperaba en mi visita a Siem Reap, es el ambiente que tiene la ciudad de noche. La población vive en su gran mayoría a las afueras de la ciudad, por lo que el movimiento de gente en el centro no es muy masificado, y eso también se agradece.

Estuvimos cenando en un restaurante bastante peculiar «Dead Fish Tower». Situado de camino al centro y que presenta este aspecto.

Una vez dentro, el lugar está dividido en varios niveles, tanto puedes comer sentado en silla como si te apetece hacerlo en unos cojines. La comida variadita desde la típica khmer, pasando por thai, china hasta filetakos de los buenos. Aunque Sergio no tuvo suerte con la elección esa vez… a veces uno no siempre acierta :/

Uno de los atractivos del lugar, es que cada cierto tiempo, en el escenario central, se lleva a cabo la danza tradicional de Camboya, danza Khmer, que la realizan las bailarinas apsara.

De día, nos cruzamos con gran cantidad de turistas en los distintos templos que visitamos, y ya de noche, el ambiente se concentra en la calle conocida como «Pub Street». Como ya comentaba en un post anterior al inicio del viaje, es el lugar donde se encuentran la mayoría de restaurantes y bares de la ciudad de Siem Reap.

Nosotros tuvimos ocasión de estar en un par de ellos el sábado por la noche. Sin duda, el más curioso, un bar llamado: «Angkor What?»… si, si, no me he equivocado al escribirlo. En su interior, no había hueco alguno en sus paredes que no estuviera escrito con algún mensaje… hasta en el techo. Gente de muchas nacionalidades (españoles se escuchaban muchos) llenaban el bar, disfrutando de la música y unas copas.

Y allí nos tomamos algunas copitas, aunque lo que tomamos fue un cubo (como el que se ve en la foto) que salía bastante bien de precio, y en su interior a gusto de cada uno: ron+cola, vodka+redbull…

Siempre es bueno conocer las dos caras del turisteo, una en la que te pones las botas de templos y de la cultura del país, y la otra, cuando te puedes tomar algo tranquilamente y descansar para reponer fuerzas para el día siguiente.. Aunque a veces uno se imagina que en sitio tan pequeños te vayas a encontrar un ambiente tan animado como el que vivimos en la noche de Siem Reap. Vale la pena descubrirlo.