Nuevo cambio

Bueno, parece que ya hemos encontrado un nuevo lugar al que mudarnos. Después de ir seleccionando zona, viendo pisos aquí y allá, hemos dado con el que a nuestro juicio es el mejor dadas nuestras posibilidades.

Seguimos estando en la zona de Kowloon pero ahora nos hemos venido un poco más hacia la izquierda, más en concreto al lado de la estación de Olympic (línea naranja MTR de Tung Chung). Nada vez que con el ambiente de nuesta casa actual, no solo por el número constante de gente que uno se encuentra por Mongkok y sus cercanías, sino en el ambiente la cosa cambia. El haber tenido algunos problemillas en casa, ha acelerado nuestra búsqueda con miedo a que el agua volviera a hacer de las suyas. Y por eso de respetar tradiciones, tampoco nos mudamos antes.

En fin, que dentro de un par de semanas ya nos mudaremos al nuevo piso. Habrá que hacer un video de inauguración o algo, no? pronto más detalles 🙂

Un básico

Que curioso que tenía en mente escribir un post sobre este aparato en cuestión y el otro día veo en uno de los blogs que sigo, el de Alain Kun, escribía un post sobre la famosa máquina de hacer arroz. No sé como podía haber dejado pasar por alto este aparato tan útil.

Yo que más o menos me apaño en la cocina, aunque no soy de grandes platos pero si me gusta improvisar con lo que haya, no me había puesto a hacer arroz nunca, y muchos dirán: alaaaaa!, pues si, quizás con el miedo a hacer un estropicio o no por pereza. La cuestión es que ahora no tengo excusa 😀

Mi novia me enseñó a usarla, aunque luego de saberlo no tiene mucha ciencia. Basta con echar con un vasito de plástico la medida de arroz según las personas y luego rellenar con agua hasta una cierta altura, eso si, habiendo lavado el arroz un poquito, por si las moscas.

El modelo que tengo en casa (aunque los hay más complejos) cuenta con un botón en el medio que tiene dos posiciones: Cocinar y Calentar, de lo más sencillo. Una vez tengamos el arroz en el recipiento gris que se muestra en la siguiente foto y puesta la tapa, poner en la posición Cocinar…. esperar y el arroz listo en 10 minutos, además de mantenerlo calentito 🙂

Si se fijaron en la primera foto, también cuenta con un recipiento de plástico blanco en el que podemos colocar comida, de forma que, cuando se está cocinando el arroz se puede ir calentando, así ahorramos tiempo y nos evitamos el microondas.

No puedo estar más de acuerdo en lo que dice Alain, que no debe faltar en cualquier hogar que se precie. Ya sabemos lo fundamental que es el arroz en la cocina asiática y una buena fuente de energía.

Ojo de dragón

Como sé que tanto gustan los posts con frutas, ya era hora de que fuera hablando de una nueva. Se trata del longan (龙眼) o también conocido como ojo de dragón. Originario del sur de China aunque también lo podemos encontrar por el sueste asiático y en Indonesia.

Y se preguntarán, por qué ojo de dragón? igual muchos ávidos lectores se habrán dado cuenta que cuando se pela esta fruta, de lo transparente que es se ve la semilla, dando la sensación de ojo.

También lo podemos encontrar en su variante seca como podemos ver en los paquetitos de a continuación. De esta forma se puede usar para añadir a sopas u otros platos. Yo lo he probado en sopas y le da un toque interesante, muy bueno 🙂

Una fruta que tiene un sabor dulcito y estando fresquita mejor aún, sobre todo en el verano. Y no nos podemos olvidar de su uso dentro de la medicina tradicional china, desde la semilla hasta las raices de este fruto. Según he leido puede aliviar la ansiedad, o bien haciendo uso de las flores beneficia a nuestros riñones o con las raices poder tratar la diabetes. Increible lo que uno aprende no?

Es un buen punto de partida para futuros posts hablar de los remedios medicinales chinos, no les parece? es parte de la inmersión cultural estando aquí, y lo interesante que es.

Lo dicho, de vez en cuando un ojo de dragón pal cuerpo 😀

Pastelitos

Como cada año por estas fechas, se empiezan a ver los famosos Moon Cake (月饼, yuebing) esto quiere decir que el festival de Medio Otoño se va acercando. Fue el año pasado cuando los probé por primera vez y este año no va a ser menos. Curiosa la historia que encierra a estos pastelitos, en los que tiempo atrás portaban mensajes para poder despistar al enemigo y levantarse victoriosos.

Es tradición que se encarguen estos pastelitos para regalar entre familiares y amigos, hasta he recibido cartas a la oficina con el catálogo de los tipos de pastelitos 🙂 Este de la foto es el pastelito tradicional, doradito al horno y relleno de yema de huevo, o también con semilla de loto. Luego con el tiempo han ido saliendo más y más variantes, innovando con los rellenos.

Los empaquetados son de los más diverso como podemos ver en un par de fotos a continuación:

Donde el color rojo no puede faltar y acompañado de adornos dorados. Una bonita presentación para este dulce tan típicos de estas fechas que se nos acercan.

Si quieren curiosear un poco incluso hay una web: www.mooncake.com que permite hacer los pedidos on-line. Más fácil imposible, qué cosas esto de las nuevas tecnologías y lo bien que vienen para mantener la tradición a golpe de clic.

Yo no me quedo sin pastelito lunero, y ustedes?…