Otro de los indicadores que nos recuerdan hasta donde llegaba el mar hace muchos años atrás y es que era por donde discurre la calle Johnston con sus tranvías la frontera entre el mar y la tierra. Wan Chai
que era un pueblecito pesquero se ha ido transformando con el paso del tiempo, mezclando tradición e introduciendo elementos más modernos y con partes diferenciadas. El nuevo Wan Chai que conforma la zona reclamada al mar (entre los años 1921-1929) por donde hay hoteles, centro de convenciones y edificios de oficinas / residenciales; la parte que da más hacia el interior que conserva su templo, la antiguüa oficina de correos y los mercadillos que se mantienen en activo.
Poco a poco, como si de champiñones se tratase, hay edificios que desaparecen para dar paso a nuevas estructuras. En la actualidad diría que hay como tres o cuatro ubicaciones con edificios residenciales a punto de terminar, mientras tanto se intenta conservar algunos de los edificios históricos que le dan carácter al barrio.
Es muy interesante el pararse un rato y leer estos cartelitos, creo que no se les presta toda la atención que se debiera. En ellos nos desvelan datos curiosos del pasado como era la popularidad de las casas de té en la zona que con el tiempo fueron extinguiéndose poco a poco para dar paso a otros negocios. Una mezcla entre dispensarios, tiendas de pescado seco, casas de empeño, puestitos varios y bastante oferta donde comer.
¿Se suelen fijar en los detalles como estos cuando hacen turismo? O bien, van a tiro hecho cuando quieren visitar un lugar. Creo que es importante no perder nunca la capacidad de asombro ante los pequeños detalles, es una buena práctica. Da igual que vivamos en un sitio o estemos de paso, mantener siempre los ojos en alerta.
Si son muy evidentes sí me fijo en los carteles, otra cosa es que estén muy elevados o escondidos
Y en tu ciudad han puesto también cartelitos parecidos en los que cuente un poco de los lugares históricos? seguro igual no te has fijado… que suele pasar 🙂