Otoño a la vuelta

Primer día del mes de septiembre, lunes y además el comienzo del curso escolar. Se acabó la tranquilidad de los colegios y el bullicio llenará de nuevo las aulas, empezando por los más pequeños y poco a poco los niveles superiores. El periodo de las vacaciones toca su fin, unas 6-8 semanas en función de cada colegio y ciertas actividades extraescolares. Luego decimos en España que nos parece corto el verano y es que nos quejamos de vicio 🙂

Digamos que ahora es el momento cuando los padres pueden tomarse un respiro porque seguro se les habrá hecho largo el tener a los niños por casa; diría que más de uno aprovecha para tomarse algún día libre, jeje.

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Desde hoy ya se ha notado una mayor actividad por la calle yendo al metro, las guaguas de los colegios o los padres y/o familiares llevando a los niños. Una semana que seguro se hace algo larga al tener que volver a los madrugones pero luego vuelven a formar parte de la rutina cuando uno se pone el chip. Así es como nos pasa a todos, estamos un poco off y sólo hace falta que nos reactivemos aunque siempre nos quedará la inestimable ayuda del café.

Y en lo que al trabajo se refiere, es también como una vuelta al cole retomando más actividad tras la ralentización que supone el periodo estival. El último trimestre del año y posterior recta final del año, pero aún hay tiempo por delante para adelantar acontecimientos.

Además el próximo martes se celebra el «festival de otoño», momento de reunirse con la familia y disfrutar de algún pedacito de mooncake si es que aún no hemos comido. Una semana que se hará más cortita. Tiempo de obsequiar a algún amigo o familiar cercano, es su turrón particular por estas fechas.

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Hacer los honores

Fue justo a la vuelta del nuevo año chino cuando se llevó a cabo la tradicional ceremonia de apertura en la que no puede faltar un cochinillo y simboliza un próspero inicio para el equipo. Nuestro timonel Lai Be, fue quien hizo los honores plantando unas varillas de incienso y con sus posteriores reverencias. Ese pequeño altar montado sobre una cajita de poliestireno y con el cochinillo como protagonista para su degustación por parte de todos en unos instantes.

Esta celebración es todo un ritual que también es habitual ver cuando un negocio abre sus puertas, muy curioso.


 

Todos listos para el corte del cochinillo y al grito de 3, 2, 1… Buzz!!

Una nueva temporada de dragonboat a la vuelta de la esquina y vamos ultimando los preparativos de cara a nuestra primera carrera que será dentro de un par de semanas en Shatin (6 de abril). Será una forma de probarnos y ver qué tal le sienta al equipo el ambiente de competición; esperemos que sea un buen arranque puesto que todos estamos muy motivados pero recordar el mantener la concentración y buenos hábitos de los entrenamientos.

Apuesto que será una temporada vibrante. Un buen grupo formado por los que llevamos unos añitos (esta es mi cuarta temporada) y gente nueva con potencial. Todos con ganas de darlo todo y recoger buenos frutos.

Lo dicho, poquito a poco y carrera a carrera, los resultados irán viviendo pero lo más importante de todo como dice el entrenador: «el día de carrera es para disfrutar, ir sin presiones y vivir el ambiente alrededor».

Paddington

No siempre se tiene que seguir la misma línea a la hora de poner decoraciones navideñas y es de agradecer que se vean cosas algo distintas y sobre todo aquellas que entretienen a los más pequeños. Ciertamente en el centro comercial de Tsing Yi se suelen currar bastante los decorados que montan en uno de los espacios habilitado para ello. A lo largo de todo el año van pasando diversos decorados bien sea por motivo de alguna nueva película de animación, exposiciones de miniaturas y como no, en el periodo de Navidades.

El tema se ha inspirado en el osito Paddington bien conocido por todos. Así que nos adentramos en el decorado…

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El vagón es casi réplica de uno de los que se usan a diario en el metro y acondicionado en el interior con más espacio para sentarse y sacarse fotos. Por lo que me fijé, también había como un pasaporte que te podían ir sellando en distintos puntos y seguro que al final daban un pequeño obsequio como en otras ocasiones.

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¡¡Pasajeros al tren!!

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Podemos visitar algunas de las tienditas que rodean la estación en las que podremos encontrar una muestra de muchos pequeños paddingtons en su famoso atuendo de chubasquero azul y gorro naranja. Da para entretener un ratito, y claro, las fotos no pueden faltar posando al lado de algunas de las figuras a tamaño real; lo que más le gusta a la gente y a los mayores como a los que más 😀

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Ahora que estamos metidos de lleno con ambiente navideño, ¿hay alguna decoración que les llame la atención en sus ciudades? Algo que se salga fuera de lo habitual, estaría bien compartirlo entre todos. ¡Navidad global!

Preparativos

Creo que son los primero adornos que veo por estas fechas, aunque no son de los más madrugadores porque hay algunas luces que ya cuelgan de las fachadas de ciertos edificios y que se pueden ver cuando cae de noche desde la zona de Kowloon hacia la isla. Ya sabemos que cada año parece que ponen más empeño en adelantar las fechas navideñas, la ciudad poco a poco va cogiendo forma con los adornos y las luces. El centro comercial IFC por el que he pasado hoy después de comer con un amigo ya cuenta con sus primero destellos.

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Anda que si pusiéramos unos copos de nieve en esta imagen, quedaría ideal! pero dudo yo que eso llegue a pasar nunca en estas latitudes. Sabemos que el calentamiento global tiene el planeta trastocado y se están haciendo esfuerzos para mejorar las políticas climáticas y reducir la contaminación (uno de los puntos calientes en la ciudad), pero en todo caso nieve de mentirita, que seguro a alguno se le habrá pasado por la cabeza.

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Un poco pronto para postales de Navidad pero seguro que hay muchos ya se han puesto manos a la obra con la preparación de las felicitaciones. Yo era uno de esos, pero con el tiempo he perdido la costumbre aunque es algo que no debiera de perderse. Sé que la gente prefiere la comodida de las felicitaciones vía email, pero no es lo mismo ni mucho menos. Donde está una postal de puño y letra.

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Sólo es el comienzo, y en cuestión de un par de semanas seguro se verán más adornos y hasta las clásicas melodías de las fiestas empezarán a sonar por los pasillos de galerías comerciales. Como quien dice, están a la vuelta de la esquia aunque a veces nos resistimos a reconocerlo porque es ese tiempo del año cuando todo se acelera y acaba un año para dar paso al siguiente. Mientras tanto nos seguimos preparando para las festividades.