Playmobil

 

Ayer que después de trabajar quedamos mi chica y yo para ir a dar una vuelta, nos fuimos hasta el centro comercial Harbour City que está ubicado en Tsim Sha Tsui, un lugar con cantidad de tiendas para perderse durante horas junto con algunos restaurantes y food court. Su acceso es por Canton Road, la conocida calle comercial de la zona.

Menos mal que era durante semana, porque lo que es los fines de semana se llena bastante de gente que es cuando aprovechan más turista de China continental para hacer sus compras. Aunque la entrada de hoy no está relacionada directamente con las compras, sino más bien alguna de las decoraciones que suelen poner en el interior del centro comercial. Esta vez si que pusieron una muy simpática: figuritas de Playmobil, aunque como podrán ver en las fotos no son lo que se dice, pequeñitas.

Empezando por este simpático payaso 🙂 Podemos ver como se alarga la fila hasta el fondo con más figuras, agrupadas en parejas, espalda con espalda.
 

 

Y claro, la gente no deja pasar la ocasión de sacarse una foto con alguna de las figuras. Sino, fíjense las dos chicas en la esquina inferior izquierda de la foto. Y es que donde esté alguien trajeado, jeje, hasta gusta en los Playmobil 😛
 

Esta fue otra de las figuras que más me gusto: el vikingo. La verdad que me trajo buenos recuerdos y la nostalgia de cuando uno era pequeño disfrutando de los juegos con algunos de los conjuntos que tenía como: la lancha de guardacostas, los vaqueros e indios o algunos de la granja.
 

Son todo un clásico de la infancia de muchos. Seguro muchos de los que siguen el blog tuvieron alguno de pequeñitos, ¿verdad? espero que no se pierdan con el tiempo, pero estas figuras son una buena prueba que están más vivos que nunca y que sea por mucho.

 

HK en Lego

 

Mira que me lo digo siempre: «no salir sin la cámara de casa», pero por h o por b, nanai. Esos momentos en los que nos pilla desprevenidos y nos quedamos con las ganas de sacar fotos y más fotos, ¿verdad? Algo similar me pasó cuando daba un paseo por TST y en concreto por el centro comercial Harbour City. La intención primera era la de encontrar la réplica de un galeón español que iba a estar estos días por la ciudad. Es cuando me encuentro esto por unos de los pasillos…
 

Nada más y nada menos que la Gran Muralla aunque en su versión reducida. Habrá que seguirla a ver hasta donde nos lleva, no?
 

 

Mientras seguía curioseando los distintos tramos de la muralla. Cada uno de ellos tenía un «dueño» distinto con su correspondiente cartelito. Hasta con hombrecitos del espacio y todo, que currado verdad?
 

Hasta el mismísimo Dr. Watson, lupa en mano. Me pregunto si andaría algo despistado y en busca de su fiel compañero de aventuras el bueno de Sherlock Holmes. Poco a poco la muralla iba dando a su fin, ¿sería el final de los ladrillitos de Lego?
 

Muy lejos de eso, ahora venía la mejor parte de todo. Se trataba de una exposición de Hong Kong hecha íntegramente con pieza de Lego y reproduciendo algunos de los rincones más característicos de la ciudad, así como, otros elementos de la cultura china.

Ni que decir tiene, que estaba a rebosar de gente. Todos expectantes y cámara en mano para retratar las pequeñas maravillas dispuestas para esta exposición.
 

 

Empezando con el templo de Won Tai Sin, situado en Kowloon y al que se puede acceder desde una parada de metro de la línea verde del mismo nombre.
 

No se pierdan los detalles que están muy logrados: flores, dragones, gente haciendo ofrendas con incienso…
 

O este otro del Monasterio de los 10mil budas en Shatin. El cual visité no hace mucho y tengo un post para contarles 🙂
 

Tampoco podía faltar el clásico junco que se ve a menudo surcar las aguas de la bahía.
 

Y en este de aquí. A ver cuantos símbolos de la ciudad saltan a la vista, sin pistas 😀
 

 

 

La actividad entre los expositores era constante. Tanto los peques como los mayores se acercaban a curiosear con detalle cada una de las réplicas. Dicho sea de paso, estaban bastante logradas y bastantes horas invertidas para que el parecido con la realidad sea el más aproximado. Yo disfruté como un enano.
 

Para cerrar el post, me quedo con esta escena. Toque friki, y lo que mola 😀