Tengo visita

 

Hoy mismito en vuelo directo desde Japón llega mi amigo Alberto para pasar unos días en Hong Kong. Parece mentira que hayan pasado ya 4 meses desde que pasó por aquí con regalitos en mano.

En este tiempo que lleva en Japón ha estado estudiando de forma intensiva el japonés antes de ponerse de lleno en su proceso de investigación durante los próximos 2 años. Ahora bien, le toca una pausa en el aprendizaje y ha aprovechado para encontrarse con unos amigos que vienen de España y la ocasión de poder juntarme con él y hacer un viaje por China (Guilin-Yangshuo) dentro de unos días. Seguro que aprovechamos para dar algún paseo por la ciudad aunque de sobra la conozca, pero sé que le encanta 🙂

Será como en los viejos tiempos cuando pisaba por primera vez Hong Kong, disfrutando de las carreras o de pateo por la ciudad. Seguro que aprovecha para recorrer de nuevo alguna de sus calles o simplemente disfrutar de unos días de descanso. sabe que siempre es bienvenido y es una alegría que esté por aquí.
 

 

Como un dandi

 

Para empezar la semana con un toque alegre, qué mejor que unos anuncios de la tele. Aunque estos son originalmente de una marca japonesa: Gatsby, se ven casi a diario en algunos de los canales de televisión aquí en Hong Kong. Sobre todo por la noche después de la cena en alguno de los intermedio de las series o después de la previsión del tiempo.

Es de una marca de productos para el hombre como: gel para el pelo, jabón facial… Dos anuncios por el precio de uno. A ver qué les parecen…
 

 
Del primero mola la diferencia entre la cara de uno y otro, vaya cambio después de un buen lavado de cara, ni cirugía ni nada 😀 Pero sin duda me quedo con el segundo de los anuncios, ese baile de muñeco de goma, anda que si estuviera en casa solo me daría por intentar imitarlo. ¿Qué me dicen de la musiquilla? de lo más pegadizo, no? Ya me veo luego a más de alguno/a tarareando el estribillo, jeje. Que empiece bien la semana para todos y a continuar mejor si cabe.
 

Toma ya!

Mira que siempre había visto las noticias acerca de las sandías de Japón pero no había llegado a tener alguna de ellas tan cerca como el otro día. En un conocido supermercado estaban promocionando estas tan peculiares sandías. Y no vean a qué precio… rondando los 1000 euritos de nada O_O

No podía faltar en su versión cuadrada o una forma algo más irregular como si estuviera estrangulada por el medio. Algo más baratita que uno de los ejemplares de la foto anterior, pero aún así, no sé si soltaría tanta pasta por una fruta. Y si luego sale mala? :/

Y como colofón, la reina de todas ellas, nada más y nada menos que 70kg de fruta ella solita. Me gustaría saber cual es la dieta que sigue, a no ser que haya hecho trampas, mmmm….

¿Alguna vez vieron semejantes sandías de forma y tamaño? unas prodigio de la naturaleza y otras parte del ingenio del hombre para darle una forma más kawai :D, a que sí, no lo sabrán bien en tierras japonesas.

Como un niño

A que gusta volver a perderse entre maquinitas como cuando uno era pequeño y gastar unas monedas en atrapar algunos regalos con los ganchos imposibles o subirse a un Doraemon a cabalgar, aunque de este no existía en mis tiempos, jeje. La excusa era haber estado dando un paseo con la sobrina de mi novia, que tiene 1 añito y poco, y para que se divirtiera un rato con algunas de las atracciones, así yo aprovechaba.

Y con la sensación de haberme traslado al mismo Japón, hasta tenía cierto aire a pachinko pero más infantil y sin el bullicio habitual de este tipo de salas. Como pueden observar, lleno de farolillos rojos y amarillos, bastante colorido y con máquinas de todo tipo, casi todas de la marca Namco.

Y parece fácil, pero a ver quien pilla un regalo de las siguientes máquinas, presentes en cualquier feria que se precie o en salas de recreativos. A pesar de gastar algunas monedas, la suerte no estuvo de mi lado, cachis…

Y con lo que me gusta conducir y por solo 3 tokens (cada token = 1 HKD, menos de 10 céntimos de euro) me eché una partidida a los mandos de un bólido conducido por el mismísimo Doraemon que tenía que encargarse de recoger bocatas por el camino. Nada más y nada menos que 48 pillé 😀

Mi precio: tarjeta de Pacman para coleccionista, toma ya! a ver si hay más suerte para la próxima. Lo que es un rato divertido, eso estuvo asegurado. Ahora me quedo con la espinita de volver de nuevo. Por cierto, a ver si hablo de los salones recreativos, algunos son auténticas joyas.