Domingo en Stanley

Uno de los rincones de Hong Kong que más me gusta por su tranquilidad es Stanley. En posts anteriores ya había hablado sobre esta zona de la isla de Hong Kong situada al sur de la isla, una vez coincidiendo que se celebraba el evento de las carreras de Dragón y otra vez que tuve ocasión de estar paseando de noche.

El día de domingo había amanecido con un cielo bien despejado y el sol brillando, no obstante, algo de fresquito soplaba por la calle, con lo que no había que descuidarse y coger algo de ligero abrigo.

El tiempo tan agradable de ese día, animó a mucha más gente a acercarse hasta esta localidad para disfrutar de un día de mercadillo y paseos la mar de tranquilos 🙂

Si uno no conociese «el otro lado» de Hong Kong, cualquiera diría que seguimos estando en la isla de Hong Kong. El cambio en el paisaje es algo tremendo, tan sólo a 20-30 minutos en guagua desde el distrito de Central, nos plantamos al otro lado de la isla y con estas vistas tan mágicas del mar.

A que tiene su puntillo, no?… Quien diría que podemos disfrutar de «otro Hong Kong», y lo que nos sigue quedando por descubrir. Así sin quererlo, había pasado la tarde y sobre las 6 el sol decidía poner punto y final a un agradable día de domingo.

Momento para retornar al centro de la ciudad, mezclarnos de nuevo entre los gigantes de hormigón y el retornar a la no-calma del «otro Hong Kong».

¿Qué cara de Hong Kong gusta más?… seguro habrá diversidad de opiniones.

Se nos va…

… el 2008. Tampoco quiero ponerme tristón ni melancólico. Justo esta mañana dando la vuelta al calendario y encontrarme con el mes de Diciembre. Hoy primer día del mes que cerrará el año 2008. No es que lo esté despidiendo ni mucho menos, queda 1 mes entero (o casi) por delante.

¿Qué decir del presente año? Echando la vista atrás, cantidad de momentos, personas y demás situaciones para recordad. Tampoco me olvido de los últimos tres meses del pasado año 2007, que como no, también cuentan. Todos ellos, parte de esta experiencia de la beca ICEX a lo largo de estos 15 meses.
Much@s compañer@s ya se encuentran colocados en nuevos puestos de trabajo, otros nos queda seguir buscando o esperar que nos salga algo, pero no por ellos el espíritu decae, algo bueno saldrá de todo esto. Además, las fechas que se aproximan… queridas para unos y para otros no tanto, diversidad de sentimientos y opiniones. Para mi como para mis demás compañeros que volvemos de esta estancia, las Navidades serán más entrañables si cabe. Seguro que los nuestros están descontando los días de nuestro regreso 🙂
Lo dicho.. ¡Bienvenido Diciembre!

¿Navidad?

Pues si… y las Navidades ya están a la vuelta de la esquina. ¿Cómo van los preparativos por España? seguro que ya en muchas tiendas y negocios en general lucen carteles y decoración propias para las fechas que se nos acercan. Que se nos va el mes de Noviembre ya…. aissss!!

Y en Hong Kong no va a ser menos. La decoración navideña ya se nota por las calles, centros comerciales, tiendas… En muchos comercio, incluso en los que venden incienso, regalos de papel, ya podemos ver las típicas guirnaldas, lucecitas y demás adornos en general.

Pero lo que más me llama la atención es la mezcla de tradiciones, a veces un poco «cutre», digamos. El más claro ejemplo lo vi el pasado sábado en el templo de Man Mo, un lugar representativo para las comunidades budistas y taoistas, y en su interior…

Ahí queda eso… pega o no pega? con gusto o de mal gusto? seguro que habrá diversidad de opiniones en este aspecto, pero una cosa si queda clara: las Navidades ya están aquí y cada rincón de la ciudad se está preparando para su llegada.

Feliz Na… digo feliz finde!! jo jo jo 🙂

Hyde Park

Este parque situado muy pegadito al distrito financiero de Sydney Central es uno de los más grandes de la ciudad. Con igual nombre que el famoso Hyde Park de Londres, aunque no sólo es este parque sino cantidad de calles por los alrededores, por ejemplo: Liverpool y Oxford Street. Nada que ver con las calles de la ciudad londinense pero resulta curioso ver cómo han adoptado los mismos nombres.

Desde una de las esquinas del parque más concretamente en el cruce de Liverpool con Oxford podemos ver la torre de Sydney al fondo. Curiosamente esta foto no está hecha a posta, luego fue cuando me di cuenta que la torre parece como si saliera del tronco del árbol que justo estaba delante, jeje 🙂

En el interior del parque cabe destacar el monumento militar ANZAC memorial, dedicado en honor de las fuerzas australianas y neozelandesas que lucharon durante la Primera Guerra Mundial en Turquía en la batalla de Gallipoli, más en concreto, el día 25 de abril de 1915. Fue al año siguiente en el primer aniversario cuando se decidió empezar con el monumento que quedaría terminado en 1934. Realmente imponente.

Siguiendo con nuestro paseo, nos encontramos con la fuente de Archibald. La historia detrás de esta fuente está relacionada con J.B. Archibald que era propietario y editor de la revista The Bulletin, el cual la mandó encargar a un artista francés (Francois Sicard). ¿Y por qué francés exactamente? para conmemorar la unión entre Francia y Australia durante la Primera Guerra Mundial. Fue en el año 1932 cuando fue descubierta al público por el alcalde de la ciudad, Samuel Mayer.

Lugar muy agradable para sentarse cerca de la fuente, con varios banquitos en los que disfrutar del almuerzo, más aún si el tiempo luce tan bueno como el día que estuve paseando por ahí.

Otro de los monumentos que destacan por su tamaño y belleza es la catedral de St Mary´s. Rebuscando un poco de información sobre esta catedral, centro del arzobispado católico de Sydney, nos remontamos hasta el año 1868 que fue cuando se pusieron las primeras piedras para levantar la edificación. Sin embargo, a lo largo de todos estos años el proceso fue lento, pasando de unas manos a otras. Terminando el interior, la nave central… y parece increible que fuera en el año 2000 cuando decidieron dotar a la catedral de los pináculos con los que cuenta hoy en día.

Vista desde una lateral de la nave central y la torre. Decir que el interior era una pasada, no sólo por la decoración de los vidrios de las ventanas sino también por la iluminación y la disposición de los arcos en la nave. Mereció la pena que pasarán tantos años para conseguir un resultado tan espectacular.

Espero que les haya gustado este pequeño recorrido por algunos de los rincones de este parque tan singular y sus alrededores. Ideal para una mañana de domingo o cualquier día de la semana después del trabajo, más que recomendable visitarlo.

P.D: Siento que la foto del interior no esté muy lograda. No quería tirar de flash estando dentro y no teniendo trípode se me planteaba un poco difícil. Al menos captar la esencia del interior del templo.