Libertad de expresión

Últimamente las cosas andan revueltas en el mundo de la prensa, y no la del corazón precisamente. No hace mucho se publicaba la lista con la clasificación por países en función de la libertad de prensa y lo que es Hong Kong no ha sale bien parado, perdiendo algunas posiciones respecto al año anterior. En la posición 58 ha quedado, y si comparamos con España (36), Estados Unidos (32) o Alemania (17), el salto es bastante grande.

Otra noticia que ha impactado bastante fue el ataque al ex-editor Kevin Lau de un conocido periódico local «Ming Pao«. Su sustitución generó algunas críticas en el sector y una forma de cortar la independencia de algunos periodistas a la hora de publicar ciertas historias, especialmente si van dirigidas contra el gobierno central.

Al más puro estilo triada, dos individuos lo asaltaron en la calle mientras se disponía a ir a su coche para ir al trabajo, provocándole serios cortes en su espalda y piernas. Afortunadamente una rápida actuación del propio Lau llamando a los servicios de emergencia y su traslado consiguieron salvarle, pero su proceso de recuperación será lento.

Foto sacada de la BBC

Las primeras reacciones no se hicieron esperar y el colectivo de periodistas salía a la calle para manifestarse dejando claro que nada ni nadie los va a hacer callar.

Foto sacada del WSJ
Foto sacada del WSJ

La policía ha conseguido detener a varios sospechosos y están reconstruyendo los detalles del ataque. Dos hombres que fueron arrestados en la provincia de Guangdong y posteriormente transferidos a la ciudad para las investigaciones pertinentes.

Lo último que ha aconteció ayer mismo ha sido otro ataque a dos miembros del equipo directivo de otro medio, a plena luz del día y en la zona de Tsim Sha Tsui. Un grupo formado por cuatro miembros con barras de metal los agredieron provocándoles algunas contusiones y su posterior fuga en una furgoneta.

En cuestión de un mes se han producido estos ataques, los periodistas están en pie de guerra y no es para menos. La respuesta del gobierno ha sido de condenar estas acciones y buscar a sus responsables en el menor tiempo posible. Mientras tanto las protestas seguro se volverán a suceder y confiando en que tan sólo sea un mal episodio del cual pasar página dentro de unos meses. Seguiremos las historias..

Salteaditos

La sección de los viernes tiene pinta de convertirse en todo un clásico de este blog y nada mejor que hacerle los honores con un buen plato de noodles.

Todo un descubrimiento como ha sido el char siu o cerdo barbacoa, y es raro durante la semana que coma un plato que lo contenga. Lo que más suelo pedir es la variante clásica con arroz y que también lo suelen acompañar con unas verduritas del día. De vez en cuando es bueno cambiar y optar por los noodles salteados que son todo un triunfo. Hay un restaurante cerca de donde vivo en el que uno de pone las botas; comida al más puro estilo local, platos abundantes y con precio inmejorable. Y ahora las presentaciones:

Si se fijan un poco en los detalles, los ingredientes de este plato son bastante básicos: cebollita, brotes de soja, char siu, noodles y poco más. Unas pasaditas en el wok con un toque de salsa de soja y listo para servir. Un plato completo que bien vale un almuerzo o una cena.

Esta vez he querido centrarme en un único plato para el post culinario de hoy. Así que esta es mi recomendación como plato de la semana, espero que les haya abierto el apetito. Y antes de despedirme dejo en el aire la pregunta: ¿arroz o fideos?

Buen fin de semana a todos!

El parque Luo Fu

En la segunda parte de visitas después de haber ido a hacer las ofrendas pertinentes, aún quedaría otro lugar que visitar. No importaba tener que tragarse otro día poquito de colas, allí estábamos todos con el mismo día propósito pero sabiendo cómo es el carácter de los chinos al volante pues las pitadas, adelantamientos por arcén o con doble raya continua no importaban.

Situado en los alrededores del monte Luo Fu, íbamos a visitar el parque del mismo nombre. Espacio verde, lago, templo; en definitiva, un sitio para el esparcimiento y donde disfrutar bajo la sombra de los árboles o al calor del solecito en aquel día un tanto inusual.

Todo hay que decirlo, el lugar tenía muy buen aspecto y eso ya decía algo. Cuando llegamos a la puerta principal del complejo nos podíamos encontrar con que tenía clasificación AAAAA en los estándares de China; así costaba unos 70 yuanes por persona la entrada, aunque los que fuesen del Año del Caballo estaban de suerte porque les saldría gratis.

¡Vamos allá! Sigamos a la gente y luego a dispersarse que por lo que vi en el mapa, bastante extensión tiene. Y no me faltaría razón al término de la visita, porque no llegamos a ver todo y eso que yo me pude aventurar a explorar un poco más. Queda pendiente para la próxima.

No pude evitar acordarme de aquel divertido programa de la tele y sus clásica prueba de las zamburguesas, jaja, aunque en esta ocasión todos superaron la prueba 😀

Y si por si acaso alguien se preguntaba el nombre del lago en cuestión: El lago del Loto Blanco que por lo que contaba en la tablilla tiempo atrás era la flor que predominaba en el lago y de ahí le venía.

Justo al fondo donde termina el lago se encontraba el templo Chongxu al cual peregrinaban los visitantes. Los puestecitos justo a la entrada ofrecían desde varillas de incienso, molinillos de viento e incluso moneditas para poder tirar a un pozo de los deseos con dragones que tenía a mis espaldas. No debe ser mal negocio vender todo esto y además algunos refrigerios, porque con el calor de quemar incienso junto con que ese día la temperatura había subido de forma inesperada.

Ya en el camino de vuelta decidimos ascender a la «Colina del Ciruelo», cuyo nombre viene de la cantidad de ciruelos allí plantados y en algunos de los cuales habían empezado ya a florecer. Una parte menos transitada del parque y desde la cual disfrutar de unas bonitas vistas de las montañas cercanas.

No fue una mala forma de culminar el día con esta visita. Todo lo que sea conocer rincones nuevos es algo que siempre me gusta, a pesar de la masificación de esos días pero en parte comprensible por estar metidos de lleno en unas fiestas tan importantes como las que se celebraban.

Ofrendas

En toda festividad china que se precie el aspecto de las ofrendas es muy importante, una forma de honrar a sus antepasados y recordarlos en estas fechas especiales. No sólo la familia se reúne para comer, beber, tirar fuegos artificiales.. sino de visitar el templo y quemar incienso en memoria de los suyos.

Lo malo de esto es que se junta mucha más gente de lo habitual y eso provoca las consiguientes colas. Nos desplazamos hasta un templo en el región de Boluo, cerca del monte Luofu. Apenas media hora de trayecto pero que se incrementaría por la afluencia masiva de vehículos y añadiendo que las normas de tráfico en China se las toman un poco a la ligera, los que hayan estado seguro lo habrán experimentado.

Llegados al lugar en cuestión una de las primeras cosas que llama la atención es este muro lleno de cantidad de estatuillas de dioses, frente a las cuales muchos de los visitantes se detienen para iniciar alguna ofrenda.


 

Lo anterior sólo sería el aperitivo antes de entrar el complejo del templo donde el humo de las varillas del incienso llenaba el ambiente y se escuchaban las voces de unos rezos. Era un continuo ir y venir de gente de un lado para otro que buscaba su rincón particular.


 

 

Un árbol de los deseos tampoco faltaba. Escribir un deseo en un papelito, envolverlo y lanzarlo para que con suerte quede enganchado en una de las ramas.


 

Incluso contaba con una pagoda; un complejo de lo más completito. En lo que los familiares de mi novia estaban con sus ofrendas, me dio tiempo a explorar un poco y de paso hacer también algunos nuevos amigos que quisieron practicar un poco de inglés, además de ofrecerme unas galletas de arroz 🙂

Los monjes no podían faltar aunque estos no estaban rezando precisamente, sino dando indicaciones a este coche que recién llegaba. Imagino que sería algún conocido o tal vez ¿su maestro? No pude despejar la duda porque no llegue a ver a quien estaba dentro del mismo.

Acabada la visita, momento de volver al coche. Algunos incluso vienen en guaguas y todo, un lugar de peregrinación bastante popular y más por las fechas que nos ocupaban. Vuelta al lío en la carretera..

La verdad que fue interesante poder conocer un sitio nuevo durante las fiestas, puesto que en años anteriores me había limitado a estar por los alrededores del pueblo de los familiares de mi novia. Diría que no me importaría volver en otro momento del año que seguro esté menos masificado.