Aprovechar la comida

Cuándo no habrá sido que salgamos a comer y luego no podemos terminarnos todo lo que hemos pedido? Aprovechar la comida es una medida necesaria para evitar pedir de más y ser más conscientes de los problemas que puede acarrear. El reciclaje no sólo de papel, cartón, plástico sino el de la comida que va a parar a la basura.

De sobra se sabe que la ciudad tiene los vertederos casi a su máxima capacidad. Concienciar a la gente es una parte y también el uso de instalaciones para procesar los desperdicios. En este último aspecto tenemos la reciente apertura de una planta de incineración en Tuen Mun que está a la vanguardia en tecnologia, hasta con un spa. Aunque esta en concreto sea para tratar aguas residuales pero aliviando la carga de los vertederos.

Los anuncios

Recién hemos dejado atrás el Año Nuevo Chino con lo que todo ello implica. Momento de celebraciones en los que no falta la comida. Igualmente en estas fechas hay que saber comedirse con tantas reuniones familiares. Uiss si yo les contara de las veces que hemos ido a China, es un no parar.

aprovechar la comida

Este es uno de los vídeos de la campaña en cuestión. Y tampoco falta la mascota, que es como una mancha de grasa andante 😀

Recuerden de ser comedido a la hora de pedir. Más vale quedarse con hambre y pedir algo más luego; típico lo que suele pasar si uno se junta con un grupo de amigos o la familia.

Otra buena forma de aprovechar la comida y que aún puede usarse es donarla a organizaciones. De los supermercados, se puede aprovechar la comida con fecha de caducida más temprana. Organizaciones como Food Angel se encarga de preparar comidas y luego distribuirlas a la gente más necesitada como en algunos centro de mayores.

Un almuerzo rico,rico

De vez en cuando hay que darle alegrías al cuerpo y si es con la comida mejor aún. Un almuerzo rico, rico para terminar bien la semana. Otra reserva gestionada a través de la app de Eatigo (que ni mucho menos me pagan xD) y con el consiguiente ahorro. Buena opción para probar sitios nuevos sin duda.

El entrante

Empezamos con una cremita de maíz y además venía con cotufas. Muy interesante la combinación del sabor dulcito de la crema junto con el salado de la cotufa. Buen comienzo.

El plato principal

Se me olvidaba comentar el nombre del restaurante, Porterhouse, y su especialidad son las carnes. Iba con la idea en mente de una hamburguesa y sin discusión. Para nada defraudó, el panito estaba crujiente y esponjoso, y la carne en su punto. Disfruté cada bocado, y las papas fritas tampoco se quedaron atrás.

Igual para la próxima visita lo suyo sería pedir un filete o probar otro tipo de hamburguesa. Por cierto, también tenían menús del día pero no estaban incluidos en la oferta.

un almuerzo rico, ricoEl café y el postre

Como siempre reservo un hueco para el postre, ejem. Un tiramisú de té verde con helado de vainilla. Soy muy fan del tiramisú por si no sabían.

Un cafecito para acompañar el postre y completos. No vaya a ser que me entre sueño de vuelta a la oficina, menos mal que era viernes.

 

El ambiente muy agradable y no pude elegir mejor hora para ir. La hora punta del almuerzo había pasado y se estaba muy bien. Estaría bien que para la próxima ocasión pudiera ir con la familia. Seguro que tienen algún menú de almuerzo / brunch. Habrá que echarle un vistazo si se tercia.

Y como quien no quiere la cosa, el mes de febrero se va despidiendo. Toca disfrutar del fin de semana, siempre y cuando el tiempo lo permita.

¡Buen finde a todos!

Un buen bocadillo

¿Un buen bocadillo qué debe tener? ante todo buenos ingredientes y que sea sabroso ante todo. Su atractivo puede ser su nombre, la foto del menú o bien los comentarios de la gente que lo haya probado.

El lugar

En «Bread and Beast» han conseguido darle una vuelta de tuerca a bocadillos clásicos. Lo que a simple vista pudiese parecer un bocadillo con una pechuga de pollo empanada, ensalada y mayonesa es más que eso.

El bocadillo

Mi elección fue el Kentucky San. Y si, un bocadillo con pechuga de pollo, col blanca, mayonesa Kew Pie de curry y toque de gengibre. La mezcla de sabores increíble y también el punto del pan tipo ciabatta.

Y el tamaño del bocadillo bastante bien; uno se queda satisfecho. Eso sí, pedí como acompañamiento unos fritos de raíz de loto, muy recomendables también.

un buen bocadillo

En la calle donde está situado el local se respira mucha tranquilidad. Es también una zona de lo más diversa, desde un sitio para sopas pegado al lado de un sitio de noodles. No es el primer sitio que he visitado, igual se acuerdan del sitio de curry que hablé en su día. Un poco más allá tenemos una tienda que vendre tuberías metálicas u otra que tan sólo tiene sacos de cemento.

Aunque puedan pensar que sea un sitio nuevo, hace no mucho hacían su 2°aniversario. ¿cómo es que no había ido antes? Cosas de estar probando la aplicación Eatigo (descuentos cuando se reserva) y vaya que si valió la pena.

Iremos descubriendo más sitios y sacarle partido a los descuentos 🙂

Comer marisco en Sai Kung

¿Qué les parece si nos vamos a comer algo de marisco? Un plan improvisado donde los haya en una tarde de sábado. Aunque sea un típico sitio de turistas, también a la gente local les gusta ir a comer marisco en Sai Kung. También era la primera vez que llevábamos a las niñas hasta el sitio, y fue menos odisea de lo que nos esperamos.

Justamente ese día habíamos quedado con unas amigas de mi mujer para almorzar en Kowloon Tong y coincidió que luego su hermana y su marido vinieron a la ciudad. Se les ocurrió el ir hasta Sai Kung para hacer una cena familiar. Así que pillamos un taxi desde donde estábamos hasta allá, y a pesar de pillar un poquito de atasco a la entrada del pueblo nos llevó en total unos 40 minutos.

El paseo marítimo

comer marisco en Sai Kung

Los restaurantes

Como aún era algo temprano para empezar a cenar, recorriomos el paseo marítimo y sacamos algunas fotitos. Como la mayoría de restaurantes están a lo largo del paseo, podemos dar un vistazo al menú y ver la materia prima en los tanques de agua. Dar una vueltita para pensar qué sitio nos llama más y coger mesa.

A pesar de ser fin de semana, se podía estar. La gente que habia estado de «Junk» durante el día empezaba a regresar. Disponibilidad de mesas sin problema. Cenar algo más tempranito y luego emprender el camino de vuelta a casa.

cenando en Sai Kung

Los letreros de neón empiezan a iluminar la noche y haciendo de reclamo para la posible clientela.

La comida

En una cena de marisco que se precie no falta: cangrejo, almejas, gambas, pescado, ver y arroz. De lo más que me gustó fue el cangrejo y el pescadito al vapor. Me pedí una cervecita y el resto como es habitual té y algún refresco.

manos a la obra

¿Nos quedamos bien después de la cena? y tanto que si, aunque quizás lo menos agradable de todo fue la cuenta. Ahí es cuando entra de nuevo lo que mencionaba al principio del post: lo turístico. Como se suele decir, un día es un día y como todos quedamos contentos; fue mi cuñado quien tuvo el detalle de invitar a la familia.

Después de la cena, estirar las piernas un poquito acompañados de la brisa marina. Después de la actividad intensa durante el día, los botes de pesca se toman su merecido descanso; mañana será otro día y habrá más marisco para vender.

hora de recogerse

El camino de vuelta esta vez lo hicimos con la combinación de guagua más tren. Pudimos subir el carrito sin problema a la guagua, hacer luego la conexión en Choi Hung hasta Kowloon Tong y el tramo directo hasta Fanling.

Esperemos que la próxima vez que vayamos a comer marisco en Sai Kung optemos por algo menos turístico o sino para ir a pasear con tranquilidad, o quizás dar una vuelta en barquito por la zona. Seguro a las niñas les gustará cuando tengan más conciencia de ello.