Balance 2011

 

Estos primeros días del nuevo año están siendo de bastante ajetreo, y es lo que suele pasar después de la vuelta de las vacaciones. Uno se encuentra con los papeles acumulados tras nuestra ausencia y hay que ponerse al día en cuanto antes. Si que me hubiera gustado contar algunas cosillas más durante la semana pasada, pero cuando me vine a dar cuenta, nuevamente nos habíamos plantado en el fin de semana. La previsión para esta semana que entra es que sea algo más tranquila con parte del trabajo ya solventado y terminar de ponerme al día.

En lo que respecta al título de esta entrada, es un buen momento para analizar lo que dio de sí el año 2011. La verdad es que hubo bastante cositas entre el trabajo, algunos viajitos, estudio y también deporte. En definitiva no fue un mal año y esperemos que este recién empezado sea mejor si cabe o al menos que se iguale 🙂

Propósitos

– Continuar con el aprendizaje del cantonés y/o mandarín.
– Certificaciones informáticas.
– Mejorar con el dragonboat.
– Hacer mejores fotografías.
– Que no falten escapaditas viajeras.
– Conocer sitios pendientes de Hong Kong.

Y por supuesto, que no decaiga el blogueo. Seguir compartiendo más historias y experiencias como he venido haciendo hasta la fecha. Tenemos muchos meses por delante para responder comentarios, emails y todo aquello que se genera a través de est as páginas.

Por lo pronto ya tengo en mente por dónde irán los posts que vengan a continuación, quieras que no algunas historias siempre se quedan con algo por contar. Se han propuesto ya cosas en firme para el 2012? Quedo a la espera de sus comentarios.

 

Selección

 

Se acuerdan cuando les comenté que me contactaron para ver si estaba interesado en mandar una selección de fotos mías y decidir entre ellas alguna para publicar. En aquel momento, no sé si debía mandar tan sólo unas pocas y antes la duda, decidí mandar unas cuantas más. La elección no se me hizo nada fácil, pero creo que entre las que escogí, son muy representativas de lo que es la vida en la ciudad.

El tema de las fotos como pueden observar, es diverso. A pesar de mi fascinación por los rascacielos y la fama que tiene su skyline a nivel mundial, hay mucho aspectos que hay que descubrir. Hay zonas de la ciudad que conservan la esencia de los días pasados y donde se respira un ambiente más sosegado. Ahora revisándolas, veo que en su mayoría las fotos son sacadas de noche y es que el ambiente es aún más mágico sobre todo por los tonos que se consiguen, aunque los días de cielo azul no faltan.
 

Si hubieran sido ustedes los reponsables de la revista y tuvieran que decidirse, ¿cuál de ellas dirían? vale poder elegir más de una opción 🙂 Por cierto, se acuerdan cuál fue una de las que se publicaron en la revista HK Magazine? De hecho fueron dos.

Ya me dirán qué les parecen. Seguro que no va a ser la primera vez que vean posts parecidos, eso me da alguna idea para el futuro, lo iré pensando mientras tanto.

 

Otra cara

 

Siempre he dicho que si volviese a vivir en la isla de Hong Kong, esta zona podría ser una de las opciones por cercanía a la oficina, bien comunicada y también porque tiene tranquilidad. Quizás si uno menciona el nombre de Wan Chai le vienen a la cabeza cosas como: ajetreo, computer centre, bares… que es lo que se viene concentrando entre las calles del centro por las cuales fluye la mayoría del tráfico que va en dirección a Causeway Bay o bien la calle por donde pasa el tranvía. Sin embargo, si nos adentramos en la zona más interna y pegada a la montaña, la cosa cambia bastante.

Hace un par de fin de semana fui con una amiga a dar una vuelta. Con la excusa de que se había comprado una cámara de fotos, decidimos salir a recorrer algunas de las callecitas de la zona a ver qué cazábamos. Primeramente pasamor por Sham Shui Po, aunque no tuvimos mucha suerte con el tiempo pero parece que pintaba mucho mejor por la isla y la lluvia no amenazaba.

Nos metimos por una de las perpendiculares a Queen´s Road East y esto fue con algunas de las cosas que nos encontramos.
 

Un container solitario lleno de graffitis en un terreno aún por construir. La zona estaba toda vallada y hasta con un señor en su casetita cuidado de que nadie se metiese en la propiedad. Me pregunto qué planes tendrán para ese solar, pero tiene pinta que lleve bastante tiempo sin tocarse.
 

Seguimos subiendo hasta que el camino nos obliga a girar hacia la derecha, estamos en la parte trasera de unos edificios de viviendas pero en los que también hay algunas tiendas en los bajos.
 

 

Es una zona muy tranquila, perfecto para una galería de arte o taller de manualidades. Lo que sí, está algo escondido. No obstante, el acceso desde la calle principal está señalizado para que los curiosos sepan llegar sin problema.
 

El fresquito bajo la sombra de los árboles se agradecía, parecía como si la humedad hubiese disminuido. Nos pasamos un buen rato curioseando las esquinas en busca de algunas fotos interesantes, y es que el lugar se prestaba a ello. Creo que tendré que volver más adelante.
 

¿Qué o quién estará al fondo de este callejoncito? hasta los dibujos de la pared parecen cobrar cierto aspecto maligno, muajajaja…
 

Las luces de la calle están cerca, apenas nos hemos dado cuenta y la noche ha caído. El brillo de las luces crece y con ello el sonido del pasar de algunos coches, hemos vuelto a la realidad. Un mural muy colorido nos guía el camino de salida. Puede que hasta lo hayan pintado algunos de los miembros de esa galería o taller cercano.
 

Merece la pena observarlo de cerca porque tiene algunos detalles simpáticos. Incluso una recreación de un momento «planking» 😀
 

Seguro que si seguimos explorando la zona, podamos encontrarnos con más sitios tranquilos donde sorprendernos con algo de arte local y desconectar de la ciudad.

 

A cincuenta

 

Los que me siguen en G+ verían la semana pasada que comenté acerca de una nueva adquisición para mi cámara, de la cual llevaba tiempo tras ella. No es que no esté contento con la lente que venía cuando la compré (18-135mm) que es muy versátil, tanto para sacar fotos de paisajes como hacer zoom y pillar cosas que no están tan al alcance o a personas de forma un poco más desprevenida, y es que quieras que no, a veces las lentes de las cámaras pueden intimidar un poco si están algo cerca, ¿no?

La lente en cuestión es una de 50mm f/1.4, digamos que es una pieza básica a tener en cuenta en el equipo de alguien que se interese un poco más por la fotografía. Ofrece otro punto de vista totalmente distinto, uno tiene que pensarse más las cosas a la hora de sacar las fotos y acostumbrarse a que la distancia ahora varía, no podemos estar demasiado cerca o demasiado lejos.

Como durante la semana no había tenido tiempo para salir con ella, el fin de semana era el momento perfecto para salir a probar y ver qué podía captar. El domingo es un buen día mismamente y después de haber madrugado para hacer una sesión de dragon boat, es buen momento para dar un paseo. Más tarde había quedado de encontrarme con mi novia y unos amigos para ir de dim sum, con lo que tenía un par de horas por delante. Lo malo: el tiempo parecía no acompañar y algunas gotas de lluvia empezaron a caer, mal asunto, pero afortunadamente sólo fue algo temporal. Aquí están algunas de las fotos, yendo desde Central hasta Mongkok en varios tramos.

Dentro de pocos meses tendremos una gran tienda de GAP en el corazón de la ciudad. Trabajando a todo trapo para tenerla a punto cuando llegue la fecha.
 

El tráfico por los alrededores es fluído. Se nota que es fin de semana y además en casi horas del almuerzo.
 

Rompiendo con la rutina del metro, muchos saben lo relajante que puede llegar a ser un paseíto en barco a bordo del Star Ferry, sino pregúntenle a Alberto, Pau, Álvaro o Urías, pueden dar buena fe de ello. Un recorrido que cuesta la friolera de 3 HK$ aunque antes incluso era algo más barato.
 

 

Nos plantamos en TST, lateral del Kowloon Park, con la calle casi sin coches pero la gente es un no parar. La cercanía de Canton Road y Nathan road, dos ejes comerciales importantes hacen que siempre haya actividad en la zona.
 

 

Después de una paradita en Jordan para disfrutar de un dim sum que nos salió a sólo 5 euros por persona (eramos 6 en total), próxima parada: Mongkok. Siendo la distancia relativamente corta, podríamos haber ido dando un pequeño paseíto, pero nuestra sorpresa al salir del restaurante que estaba cayendo un buen palo de agua. Lo dicho, nos vamos al metro que al menos había una salida cerca.

Un buen sitio para perdernos entre planta y planta es el centro comercial Langham Place. Buena oferta de tiendas curiosas, restaurantes, cine…
 

Bastante satisfecho con las primeras fotos, he puesto algunas más en la página de Facebook por si quieren echarle un ojo. Creo que esta lente dará mucho juego, así que, su hermana mayor reposará o al menos intentaré alternar el uso de ambas. Creo que se merece un descanso mientras un servidor se tomaba un cafecito.