Por la pista

Un sábado como otro cualquiera, mi momento para salir a correr y disfrutar del comienzo del día. Esta vez mi recorrido me llevó a pasar por la pista de atletismo en Sheung Shui. Esta vez sí que no fue algo planeado si no que surgió cuando iba de vuelta a casa, y no me pude resistir.

Parece mentira que viviendo en Fanling desde hace 10 años ya, y aún no había ido a esta pista. Hablando de distancia, viene a estar a unos 3kms de casa con lo que sería una buena forma de calentamiento y luego meternos en faena con algún entrenamiento acorde.

Eso me hace recordar que fue hace ya 10 años cuando sentía la llamada de correr. Coincid´ía el final de nuestra estancia en Tung Chung cuando iniciaba los primeros compases en la preparación de lo que ser´ía mi primera media marat´ón en 2014, y todo lo que ha llovido desde entonces. Han caído kilómetros y algunas carreritas que me han llenado bastante.

Va a ser que tendr´é que pasar algo más por la pista y aprovechar la instalaciones, no? desde las 6:30 que abre, no tengo excusa y ser´á cuestión de adaptar el recorrido para dejarme caer. Una forma también de ver si mejoro en distancias cortas y ex`plosivas que favorecen en las tiradas largas.

Por cierto, no les he comentado que estoy con la preparación de la Maratón de Hong Kong (21 de enero, 2024). Este será mi p`róximo reto y con mucha ilusión con estos meses por delante.

¡Felices kilómetros!

Volvimos a Osaka

Después de cinco años desde la última visita, volvimos a Osaka. Justamente fue el segundo destino cuando las niñas tenían poco más de un año después de haber ido a Tenerife un par de meses antes.

Lo que sería mi cuarta visita a la ciudad y la estancia de mayor duración. Con ganas de recorrer de nuevo sus mercados..

La popular zona de Dotonbori y su multitud de establecimientos para disfrutar takoyaki, okonomiyaki, ramen o izakaya. Hay donde elegir.

Y si queremos ocio: karaoke, juego de dardos..

Para que sirva de aperitivo, unos pinchos para abrir boca.

Fue un viaje bastante completo y con tiempo para patear, ir de parque de atracciones, descansar y hacer algunas compras.

En un próximo post les contaré algunos detalles más de lo que dio de si. Espero que me acompañen 🙂

Comiendo variadito

Aquí va uno de esos posts que tanto éxito suele tener, y es que la comida siempre capta la atención y más cuando podemos estar comiendo variadito.

De nuestra reciente visita a China después de haber estando ausentes durantes unos años por todo aquello del Covid, era momento de poder reunirse con la familia. Disfrutar de unos días en el pueblo, y nada más llegar vamos con unos platos de fideos fritos y arroz. Cervecita para acompañar.

Al día siguiente tocó almuerzo de los que empiezan tempranito y con la variedad de platos habituales: carne, verduras, sopa, y arroz que no falte.

Aunque también hubo sorpresas como esta visita a un restaurante japonés. Estaba muy bien ambientado y con sus estancias privadas en las que te tenías que descalzar. Un almuerzo donde hubo sushi de sobra, algo de pescado y pollo frito junto con té verde. La verdad que me gustó bastante y estuvimos muy bien atendidos.

Y finalmente, los platitos de dim sum no pueden faltar en cuanto hay reuniones familiares. Hay para elegir, ¿verdad?

Y de todo lo que han visto, ¿qué les gustaría elegir? ¿dulce o salado? Ahh, y esta vez no hubo postre, aunque ya saben que los chinos para los postres son un poco suyos. Si acaso algo de fruta en casa o algo de helado.

La playa dorada

En la visita que hicimos hace no mucho a Tuen Mun, otro de los lugares para pasar una buena tarde durante el fin de semana: la playa dorada («Golden Beach»). Con bonitas vistas al fondo de Castle Peak.

En realidad fue un plan improvisado porque habíamos estado almorzando no muy lejos de la playa y las niñas no iban vestidas como para la ocasi´ón. No supuso problema desde luego y ellas encantadas de jugar con la arena y hacer unos castillos; tanto así que cuando llegó la hora de irse estaban renegando un poco, jeje.

Bien es cierto que eran eso de las 4 de la tarde cuando fuimos, y seguro que en las horas previas habría más gente pero se estaba muy a gusto. Soplaba algo de brisa y se notaba como al rato el sol empezaba a esconderse lentamente.

Al fondo algunos barcos pesqueros y un poquito más lejos aún se podía captar las obras que a´ún continúan en el aeropuerto con la tercera pista que inauguraron hace unos meses.

Para llegar hasta allí desde Fanling tardamos poquito más de media hora, y est´á bien conectado con varias conexiones de guaguas o minibus. La opción tren también es posible pero implica algunos cambios de línea y se tarda un poquito más.

Aún tenemos pendiente el visitar a un amigo que vive en la zona, así que no descartamos dejarnos caer uno de estos findes. El verano está a la vuelta de la esquina y esta playa se presenta como una buena opción a tener en cuenta para algún finde que se p`recie.