Pasando por Schiphol

Seguro que aquell@s con vuelos con destino Asia les habrá tocado pasar por el aeropuerto de Schiphol en Amsterdam (Holanda), uno de los puntos de conexión en Europa para dar el salto a tierras asiáticas. Hace ya casi 2 años que lo pisé por primera vez, aunque de forma muy breve, con el tiempo justo para salir del avión e ir derechito a la puerta de embarque del vuelo a Hong Kong.

Para mi gusto, un aeropuerto con encanto: chiquitito y acogedor, pero no falto de servicios de todo tipo como un buen aeropuerto. Con bastantes tramos rectos de escaleras mecánicas para acelerar el ritmo de paso, hasta en el plano que te ponen en el avión te indican lo que tardas de una punta a otra, para los que vayan con prisa y tenerlo calculado 🙂

Y no podía faltar la aerolínea de referencia en este aeropuerto: KLM, con sus emblemáticos colores azul y blanco, con la que he viajado en las ruta de Madrid hasta Hong Kong.

Entre alguno de los servicios, nos encontramos incluso con un centro de negocios. Porque en el aeropuerto también se puede hacer negocios, y entre espera y espera hay tiempo para el business.

Con una de las cosas que me quedaría, sería con el diseño tan llamativo de uno de los bares de su interior. Cualquiera diría que estamos dentro de un aeropuerto, un diseño colorista y moderno, que le da un toque distinto al aeropuerto. Precios? mejor no mirar la carta que ya se sabe en los aeropuertos, jeje 😛

Y ustedes, ya se han dejado caer alguna vez por este aeropuerto? espero sus impresiones 🙂

Merlion Park

Uno de los lugares que me quedó por ver en Singapur, fue Merlion Park. Me hubiera gustado sacarme la foto de rigor en mi estancia el año pasado, pero con el tiempo algo justo no se pudo. Esta vez con un poco más de tiempo y habiendo recorrido ya parte de la ciudad, aunque siempre quedan rincones por vistar, a pesar de lo pequeño que pueda ser este país.

Este no es el único merlion existente en Singapur, nos podemos encontrar hasta un total de cinco repartidos por distintos lugares, entre los cuales tenemos la isla de Sentosa o en Mount Faber.

Aprovechando para contar un poco sobre la palabra: Merlion. Es una combinación de mer (mar) y lion (león). De cuando los orígenes de Singapur, o conocido como Singapura, «Temasek = Ciudad del mar» en el idioma de Java. Se combina la cabeza de un león con un cuerpo de pez, parece como si fuera la cola de una sirena.

La ubicación de esta estatua es justo en frente de la zona de Marina Bay, desde donde podemos obtener una buenas vistas a la bahía de Singapur.

Nos encontramos con The Esplanade al fondo, zona de auditorio y teatro, aunque los locales lo denominan: El Durian, y no les falta razón por el aspecto externo que tiene con dicha fruta. El clima ese día era envidiable, un sol y un calor, que ufff… perfecto para disfrutar paseando aunque eso sí, que no falte cremita solar y agua, fundamental 🙂

Volviendo a Londres

Lo que son las cosas del destino, o bueno, en este caso que te retrasen un vuelo, lo cancelen y con la consiguiente pérdida de mis otras conexiones para llegar hasta Hong Kong. Pero no hay mal que por bien no venga, que al llegar un día más tarde de lo previsto, tuve unas cuantas «horas muertas» en Londres y había que aprovecharlas, y lo mejor: turistear.
¿Que si ya conocía Londres? pues claro, pero no veas la tira de tiempo… desde el verano del año 98 no volvía a pisar la ciudad, parece mentira no? Quise recordar las calles que visité por primera vez cuando era un adolescente, de esos viajes a Inglaterra en los veranos para mejorar el inglés (buen motivo para otro post).

Y ahí estaba yo, como si el tiempo no hubiera pasado, plantado en Trafalgar Square y con la National Gallery de fondo.

Caminando en dirección a la zona de Leicester Square, tan conocida por su cantidad de teatros.

En aquel momento, obras como: El Fantasma de la Ópera, Rocky… hasta encontré un cartel con una obra protagonizada por Mr. Bean, bueno, su actor, Rowan Atkinson 🙂

…en dirección al Covent Garden

¿Les suena esta curva? A ver quien sabe decirme el nombre de la calle. Seguro que con la próxima foto adivinan la conexión. Me parece muy interesante la arquitectura de este lugar, la forma curva que se pierde en el fondo, adaptándose al trazado de la calle. Y ahora me pregunto: ¿qué fue primero, la calle o el edificio? igual una pregunta algo tonta, pero no recuerdo haber visto un conjunto tan elegante, sólo podía ser inglés 🙂

Y esto más aún… Picadilly Circus y sus anuncios de neón. Asomando en la esquinita TDK y SANYO, mitiquísimos.

Una visita express pero que bien valió la pena. Lo peor de todo, dentro de lo que cabe: el tiempo. Y ya nos conocemos como es de conocida Londres por su climatología, cielo gris y puede que llueva, y llovió. Suerte que me libré de la nevada que daría lugar un par de findes más adelante, sino, aún me veo por tierras inglesas.

Osaka

¿Más Japón? … Pues ya va quedando poquito de este viaje que ha dado mucho de sí. Espero que los posts se estén haciendo amenos, a mi me está gustando recordar las cosas que vi y que hice mientras los escribo.

La ciudad de Osaka es el núcleo del área formada por Osaka-Kobe-Kyoto en la región de Kansai, siendo la tercera ciudad más grande de Japón y en constante crecimiento. No es tan cultural como otra ciudades que había visitado anteriormente, pero entre sus símbolos más representativos está el castillo de Osaka.

En el interior del castillo hay un museo en el que se relata acerca de «La guerra de verano de Osaka», donde se libró una batalla entre las familias Toyutomi y Tokugawa. Se encuentran elementos de la época de todo tipo, entre los que destacan las vestimentas que usaban los soldados. Véase una réplica en miniatura de uno de los momentos de la batalla.

Inicialmente construido por la familia Toyotomi pero tras la guerra de verano fue destruido por Ieyasu Tokugawa, posteriormente se inicia su reconstrucción, llevándose a cabo a lo largo de los años una serie de mejoras para su conservación.

Me pareció bastante interesante lo relativo a la lucha de estas dos familias, el papel que desempeñó el castillo y los distintos elementos de la época. Aquí se puede ver una cronología de las etapas por la que pasó el castillo -> Castillo de Osaka.

Después de la visita al castillo y los alrededores de su parque, decidí acercarme a una zona cercana donde se encontraba el barrio coreano. De hecho, la ciudad cuenta con una comunidad bastante importante y en la zona donde se ubica el barrio, hay un arcade (zona comercial) con cantidad de tiendecitas y restaurantes.

Por lo general, es bastante habitual este tipo de arcades. En casi todas las ciudades que visité hasta el momento, había una zona techada y con tienditas, bastante práctico para un día de lluvia y visitar la zona con calma, entre compra y compra, pues aprovechar para comer algún plato local.

El resto de la tarde la pasé recorriendo el centro de la ciudad, callejeando y descubriendo algunas zonas más de la ciudad, aunque con ganas de llegar al hotel y descansar un poco para continuar a la noche.

Osaka de noche

La zona de Shinsekai al lado de la torre de Osaka, bastante animada por la noche con cantidad de lugares para comer algo, tanto sushi, como yakitori y demás platos locales. Sin olvidarme del famoso okonomiyaki. Luces de neón anunciando restaurantes y también salas de juegos, bastante colorido y bonito de ver.

Me habían recomendado también ir a la zona de Dotombori que queda más al norte por encima de Namba, pero el tiempo no me llegaba para mucho más. Sin embargo, bastante contento con la ciudad y el ambiente que en ella se respira, sin duda, distinto a otras ciudades más históricas como Nara o Kyoto.