Hacía ya algún tiempo que les hablaba de esta zona de la isla de Hong Kong llamada Causeway Bay o CWB (Tung Lo Wan, 銅鑼灣). Lugar bullicioso donde los haya pero basta que nos vayamos a su parte «trasera» cerca del mar que el panorama es otro totalmente distinto.
En lo alto de los edificios, muchos carteles de neón que anuncian marcas conocidas y destacando en la noche desde el otro lado de la bahía en Tsim Sha Tsui (TST, 尖沙咀) o bien si cogemos el Star Ferry en dirección a Wan Chai.
Buscando por aquí y por allá doy con una escalera que me lleva a un puente, permitiéndome pasar al otro lado de la carretera que está bastante transitada a esas horas. Se nota que es domingo y la gente viene de regreso de pasar el día dando una vuelta por los alrededores de la ciudad, eso sí, sin pitas ningunas y la gente esperando con calma a que la circulación se haga más fluída.
Una interesante vista y menos habitual de lo que uno está acostumbrado. Al fin y al cabo, por las rutinas del día a día, uno siempre termina pasando por Central o TST. Además me apetecía buscar un nuevo sitio donde poder pillar los rayos del atardecer, un nuevo fin de semana que termina pero aprovechando hasta el final. Rascacielos que se pierden hasta donde alcanza la vista y con el todopoderoso Two IFC de fondo (con permiso del ICC)
Esto es lo máximo que daba de sí el zoom de la cámara.
Muy relajante la vista del puerto deportivo. Sería tentador cogerse una lanchita de esas y surcar las aguas de la bahía de Hong Kong a nuestro aire, ¿no estaría mal verdad?
Volviendo la vista al otro lado, el ritmo de la ciudad no para ni en domingo. Las luces de los coches se aceleran, las farolas empiezan a alumbrar y los edificios empiezan a brillar con luz propia.
Un nuevo fin de semana llama a nuestras puertas, ¿qué nos deparará? igual me dejo caer por CWB nuevamente? a veces pasa tiempo sin que uno ponga los pies en alguna zona de la ciudad pero luego como quien no quiere la cosa, la frecuentamos más de lo habitual en un corto período de tiempo, seguro que les habrá pasado en su ciudad y/o rincones que aún no hayan descubierto, la ciudad siempre nos tiene preparada alguna sorpresa.